Jarni revienta el compló del Compostela

Por fin conoció el Villamarín a Robert Jarni, un croata con una planta magnífica que estaba a punto de hundirse en el anonimato a pesar del cartel que trajo de Italia. Fue decisivo en los tres primeros goles del Betis y quien reventó la encerrona ideada por Fernando Vázquez. Fue sobresaliente, además, en un partido propicio para esconderse, como lo había hecho otras tardes. Lejos de tomarle asco al indigesto planteamiento que estrenó el Compostela, Jarni se salió. Pero no del partido. Si él fue el héroe, no lo fueron menos el resto de sus compañeros, cómplices en la tarea paciente de desarticular los planes del adversario.El Betis terminó dándose un homenaje. Vapuleó al Compostela después de completar una exhibición en la que Pier se empachó de ocasiones, dos de ellas convertidas.

Mientras tuvo crédito el 0-0, Fernando Vázquez entregó todo el valor del partido a la estrategia. Obviando al cualificado Fabiano y José Ramón, que anda crecido, el Compostela no es más que un concepto: presión y vigilancia. Los gallegos apretaron en tan poco espacio el desarrollo del juego que el Betis supo desde primera hora que la única receta eficaz sería la paciencia. En esa coyuntura no está a gusto Alfonso. El delantero se perdió en la selva que Vázquez había organizado a dos metros de su área y acudió a la banda a recibir consejos del estratega, Serra Ferrer.

Con la sensación general de que el Betis no encontraría barato ningún gol, llegó el primero. Ni el Compostela se había desajustado ni el Betis había logrado asomarse a la ventana de Falagán todavía. Pero apareció Jarni, recogiendo un balón sin importancia. A este futbolista no se le puede dejar que se prepare un bote para disparar. Si ocurre, lo normal es que salten los cerrojos. Mauro cometió el error de abandonar al croata junto. al área. Allí cayó un balón medio muerto que Jarni revivió con un zurdazo impresionante que entró por el centro de la portería.

El partido cobró otro aspecto. El Betis encontró a un rival señalado por las urgencias. Se abrieron los espacios y Alfonso cobró vida en el nuevo teatro de operaciones. Pero quien se agigantó con el 1-0 fue su autor. Robert Jarni, etiquetado hasta ayer como indolente y vago, dio una lección de sacrificio sin precedentes en la Liga. El croata, además, mantuvo al nivel máximo su extraordinaria clase. La mezcla descubrió a la grada toda la dimensión de este finísimo zurdo, llegado a Sevilla con el scudetto en la camiseta. Ayer, se desprendió del recuerdo del Juventus. Bajó al Betis y demostró que no hay suplente para este futbolista. El Betis también se endeudó con él en el 2-0. Agarró la banda, descuadró a Mauro y se la puso rasa, y atrás a Alfonso, que hizo el resto anudando al resto de los defensas. Cañas adornó la jugada con lo que resultó ser un golazo.

El ex juventino volvió a firmar la jugada del tercer gol y, poco después, Serra Ferrer lo premió con la sustitución.