La ley y la trampa
La Directiva no ha servido para disminuir la publicidad en televisión
Las películas siguen invadidas de anuncios. La entrada en vigor, el pasado mes de julio, del artículo de la Directiva Europea, conocida como Televisión sin fronteras, que regula la publicidad en los largometrajes, no ha supuesto una disminución en el número de anuncios. La redacción de este artículo es poco concreta y las cadenas lo aprovechan. Según todos los expertos consultados, parece que la ley, en este caso, permite la trampa.El artículo 13.3 dice: "Las obras audiovisuales, como largometrajes cinematográficos cuya duración programada de transmisión sea superior a 45 minutos, podrán ser interrumpidas una vez por cada periodo completo de 45 minutos, autorizándose otra interrupción si la duración programada de la transmisión total excede al menos en 20 minutos a dos o más periodos completos de 45 minutos".
EL PAÍS ha seguido durante tres semanas las películas emitidas por TVE, Antena 3 y Tele 5 en su horario de máxima audiencia. Los reyes del mambo tocan canciones de amor, emitida por TVE-1 el día 27 (22.25), tuvo tres cortes: a los 28 minutos, nueve de anuncios. La segunda interrupción, a las 23.21, duró nueve minutos. Ventiséis minutos después llegó el último corte, de ocho minutos.
El drama de Antonio Banderas y Armand Asante acabó, a las 0.25.
La mano que mece la cuna (TVE-1, día 13) tuvo, igualmente, tres cortes (a los 26 minutos, a los 66 y a los 98), con una emisión de 20 minutos de anuncios. La película duró 129 minutos. Otro filme de la cadena pública, Regreso al futuro II, el jueves 12, tuvo tres cortes (a los 26 minutos, a los 52 y a los 94), con un total de 21 minutos de publicidad. La película duró 120 minutos.
El día 29, Tele 5 emitió Indiana Jones y la última cruzada. El primer corte lo hizo a los 43 minutos y duró siete. El segundo, a las 23.34, también de siete. La película 1492, la conquista del paraíso, emitida el día 15, fue interrumpida cuatro veces. Los primeros anuncios, a las 22.12, ocuparon seis minutos. Otros tantos duró el segundo bloque, que comenzó a las 22.45. El tercero, a las 23.31, duró nueve minutos. El último, fue de 0.19 a 0.25.
Antena 3 emitió, el 2 de octubre, Hot shots y tuvo dos cortes (a los 20 y a los 51 minutos), con un total de 15 minutos de publicidad. La película duró 92 minutos. El día 12 a las 22.23, en Robin Hood, príncipe de los ladrones, la cadena privada emitió cuatro bloques de anuncios. El primer corte, a las 22.49, duró seis minutos. El segundo, a la s 23.22, ocupó siete. A las 23.46 llegó el tercero y duró seis minutos. El úlltimo de las 0.25 a las 0.33.
Ante estos datos, y según la Directiva, se podría deducir que las cadenas incumplen la ley, al no respetar periodos completos de 45 minutos para insertar anuncios. Ésta, es, al menos, la opinión de la Administración. Sin embargo, los programadores lo interpretan de otra forma. Así, el párrafo que dice "podrán ser interrumpidas una vez por cada periodo completo de 45 minutos" es entendido por las tires cadenas del siguiente modo: "La ley lo que dice es que podrá haber un corte por cada periodo de 45 minutos, no que tenga que haberlo cada 45 minutos", señala Ricardo Vaca, director de comunicación de Antena 3. Los portavoces de Tele 5 y TVE coinciden en su apreciación.
De este modo, si una película dura 95 minutos, puede interrumpirse dos veces, pero no cada 45 minutos, sino cuando la cadena quiera. Más aún, se autoriza otra interrupción "si la duración programada de la transmisión total excede al menos en 20 minutos a dos o más periodos completos de 45 minutos", con lo que, cuantos más anuncios, mayores facilidades. Un ejemplo: en La mano que mece la cuna, la publicidad dura 20 minutos. Dado que la película duró 128 minutos, sin los 20 minutos de anuncios sólo se podrían haber hecho dos cortes, pero la publicidad emitida permitió un tercer corte.
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