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Anabel Segura está muerta

La estudiante madrileña fue asesinada cuatro horas después del secuestro

Anabel Segura, desaparecida hace dos años, cinco meses y 16 días, estaba muerta cuatro horas después de ser secuestrada. Su cadáver era buscado aún esta madrugada bajo la tierra de un descampado cerca de Numancia de la Sagra (Toledo), en la zona de Illescas, junto a una vieja fábrica abandonada. La policía había detenido horas antes a tres presuntos autores del secuestro y asesinato, que confesaron su delito y el lugar donde ocultaron el cuerpo. Las detenciones fueron efectuadas por la Brigada, Judicial de Madrid.El 12 de abril de 1993, Anabel Segura, de 22 años, hacía deporte, vestida con un chándal, correteando cerca de la urbanización Intergolf (en La Moraleja, una zona residencial al norte de Madrid), donde vivía con su familia. Su padre es José Segura Nájera, director de Lurgi Española, empresa que construye naves industriales.

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Los autores del secuestro escogieron a la estudiante al azar. Querían llevar sea alguna persona que, presumiblemente perteneciera a una familia de elevada posición. Pero no emprendieron ninguna investigación para obtener datos al respecto. Simplemente, acudieron a las calles de La Moraleja, a las urbanizaciones de chalés en él término municipal de Alcobendas, y se llevaron prácticamente a la primera persona que pasó ante ellos y que respondía a sus ideas, según fuentes de la investigación.

Después, la introdujeron en una furgoneta, le preguntaron algunos datos sobre su familia y, apenas cuatro horas después, la asesinaron.

En una de las llamadas telefónicas que hicieron luego a los padres, los secuestradores exigieron un rescate de 50 millones de pesetas, y enviaron cintas magnetofónicas con la supuesta voz de Anabel.

Nunca llegó a ser tenida por buena esta voz, que incluso se refería de una manera un tanto atípica a sus padres, y sin llamar por su nombre a sus propios hermanos. "Te quiero, hermana", decía.

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La policía investiga aún si aquella falsa voz de Anabel es en realidad la de la única mujer detenida, quien tiene relación sentimenal con uno de los hombres acusados del crimen.

La policía sí da por seguro que los otros dos detenidos están implicados en los hechos. Tenían en su poder una furgoneta como la descrita por el único testigo del delito, un jardinero que se encontraba en las inmediaciones. Y también otros objetos "comprometedores", según fuentes policiales. Pero no sólo eso: la policía los tenía cercados desde hacía algún tiempo.

¿Cómo llegó hasta ellos? Las fuentes consultadas señalan que resultó fundamental la colaboración ciudadana desatada cuando, hace un año, se dieron a conocer por las emisoras de radio las voces de las personas que se ponían en contacto con la familia.

De los miles de llamadas que hubo, se depuraron 200 con pistas fiables. Una segunda criba las dejó en 20. Y de esa veintena, finalmente una pista acaparó el crédito de los policías. Una pista que llevaba hacia la provincia de Toledo.

El juez autorizó la interceptación de las llamadas telefónicas que efectuaban los sospechosos. Pero en esas grabaciones no se descubrió nada que pudiera implicarles. Pronunciaban frases muy escuetas cuando hablaban entre ellos, sin una sola pista. Así que se pidió una nueva autorización al juez, esta vez para colocar micrófonos en la vivienda de la pareja sospechosa. Y en este caso sí aparecieron indicios claros. Esto ocurrió hace sólo unos días.

Por fin, ayer, a las cinco de la tarde, los inspectores encargados del caso decidieron afrontar la detención. Y a partir de ese momento la investigación avanzó a velocidad de vértigo.

Los dos principales acusados unas malas personas", según los definió una de las fuentes consultadas se derrumbaron enseguida y confesaron todos sus delitos. Ofrecieron todo tipo de detalles. "Son unos delincuentes de tercera división", señaló una persona que conoce las pesquisas. Y se investiga si tenían deudas de juego.

La polica analiza el grado de implicación de la mujer detenida

La tercera persona supuestamente involucrada -la mujer- no está considerada autora directa. La policía analiza aún su grado de implicación en el asesinato. La agencia Efe informó esta madrugada de que esta persona fue quien fingió la voz de Anabel Segura en la grabación enviada a su familia.

El nombre de uno de los arrestados corresponde a las iniciales E. M. De los otros dos apenas se conocían más datos a primera hora de la madrugada de hoy. Sólo, que no son de Madrid. Diversas fuentes apuntan a que se trata de personas de la provincia de Toledo, que tenían conocimiento de la zona donde se ocultó el cadáver y sabían que en esa trabajosa operación no iban a ser vistos por nadie.

Desde hace días se les seguía la pista, y en medios de la Brigada Judicial de Madrid se tenía el convencimiento de que las pesquisas iban por el buen camino.

Casual

Las investigaciones policiales confirman, pues, la hipótesis de que el secuestro de Anabel Segura no fue una acción planificada de una banda organizada, contra una persona concreta, sino un rapto del que la joven fue una víctima casual.

La Brigada Judicial siempre mantuvo que Anabel Segura regresaba hacia su casa de la urbanización La Moraleja de forma imprevista y que no era lógico que los delincuentes estuvieran esperándola allí para secuestrarla. Además, Anabel había vuelto a Madrid desde Málaga, donde pasaba unas vacaciones con sus padres, con la intención de preparar un examen.

La investigación que ha llevado a la detención de los presuntos asesinos de Anabel Segura ha sido dirigida por el comisario Juan Antonio González, jefe de la Brigada Judicial de Madrid. A González le será impuesta el lunes la medalla de plata del cuerpo por su participación en la captura en Bangkok de Luis Roldán, ex director de la Guardia Civil.

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