Guardias civiles acusan al grupo de Dorado de "eliminar" a 4 etarras
Cuatro eliminaciones de etarras -según la propia terminología de los agentes-, dos acciones de secuestro, más de 200 pases clandestinos de la frontera francesa. Éste es el balance que el grupo antiterrorista de la Guardia Civil que dirigía Enrique Dorado Villalobos en Intxaurrondo se vanagloriaba de haber realizado durante los años de máxima actividad de los GAL, según testimonios recogidos por este periódico de guardias civiles destinados en esa época en el acuartelamiento de San Sebastián.
El propio Dorado Villalobos y su compañero Felipe Bayo Leal relataron este balance a reclusos de la cárcel de Guadalajara -entre ellos, el ex subcomisario José Amedo-, donde a principios de los noventa cumplieron condena por robo.El equipo anti-ETA de Dorado, que gozaba de la plena confianza del ahora general Enrique Rodríguez Galindo, ha sido acusado por ex compañeros de participar en el secuestro de José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala en 1983. Los cadáveres de los dos presuntos etarras fueron hallados en Bussot (Alicante) dos años después.
En plena guerra contra ETA a mediados de los años ochenta, Dorado y Bayo habrían llevado a cabo dos secuestros, en tino de los cuales fueron presuntamente eliminados dos activistas. Este hecho podría Coincidir con el secuestro en Francia de los presuntos etarras Lasa y Zabala, en octubre de 1983, cuyos cadáveres fueron hallados posteriormente sepultados en cal viva en una fosa de Bussot (Alicante).
Hubo, al menos, otras dos eliminaciones de supuestos miembros de ETA, según varios antiguos guardias de San Sebastián.
En los pases clandestinos a Francia para conseguir información y efectuar seguimientos de miembros de ETA, los guardias civiles iban habitualmente armados.
