La maldición persigue a Peñalver

Antonio Peñalver continúa sin terminar una competición de decatlón de alto nivel, desde que se proclamó campeón olímpico en Barcelona 92. Ausente de los Mundiales de Stuttgart 93, retirado por problemas físicos en los Europeos de Helsinki 94, ayer también tuvo que finalizar su actuación, esta vez después de haber realizado tres pruebas, a consecuencia de una indisposición, motivada por una infección vírica.Peñalver ya comenzó a competir con ligeras molestias, que se fueron acentuando durante el día con vómitos y diarreas. El médico del equipo español aconsejó su retirada, pues el atleta corría el riesgo de sufrir una deshidratación, pues al esfuerzo se unía las consecuencias de la infección.

En el momento de la retirada, Peñalver iba clasificado en el puesto 140, pese a su segundo lugar en el lanzamiento de peso (15,77 metros por 16,78 del canadiense Smith). En 100 metros y salto de longitud, sus resultados fueron más discretos (11.26 segundos y 7,18 metros).

No fue el único contratiempo sufrido por. el equipo español en la jornada de ayer. A excepción de Maite Zúñiga y Marta Domínguez, clasificadas para las semifinales de 1.500 metros, los restantes participantes en las pruebas eliminatorias no las superaron.

Sandra Myers quedó decepcionada tras las semifinales de 400 metros. "Creía estar mejor de forma. Pasar a la final sabía que me iba a resultar difícil, pero si no lo conseguía, al menos que me despidiera con una buena marca y, sin embargo, no logré correr en menos de 51 segundos". Myers fue cuarta, cuando se clasificaban las dos primeras, y realizó el cuarto mejor tiempo de la repesca, cuando sólo entraban los dos mejores.

Otras eliminaciones de la jornada fueron la de Arturo Ortiz en el salto de altura. sobre una marca que domina (2,27 metros) y la de Carmen Fuentes en los 10.000 metros.