El fuego de Tenerife, prácticamente bajo control en sus dos frentes

El incendio que el pasado viernes se declaró en el monte de La Esperanza (Tenerife) y que ya ha quemado unas 1.700 hectáreas de masa forestal se encontraba en la tarde de ayer casi bajo control en sus dos frentes más conflictivos. Las condiciones climáticas favorables, el apoyo aéreo por parte de dos hidroaviones y el enorme esfuerzo de todo el personal de tierra hicieron que las llamas no pasaran del perímetro afectado, gracias también al establecimiento de dos cortafuegos en los altos de los municipios de Araz, situado en el frente sur, y La Victoria, en el frente norte.

A primera hora de ayer se produjo el accidente de un helicóptero. El aparato, en el que iban tres agentes del Cuerpo Nacional de Policía, chocó contra unos cables de luz a la altura dé una pista en Ravelo, en los altos del municipio de El Sauzal, lo que obligó a un aterrizaje forzoso. Los tripulantes resultaron ilesos. Un bombero del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife sufrió la amputación de uno de los dedos de una mano cuando participaba en las tareas de extinción del fuego.

Estos trabajos también se vieron alterados a lo largo de la jornada de ayer, debido a que se produjeron diversos conatos, de incendio en Los Realejos y Vilaflor, entre otros municipios, que fueron sofocados.