La OTAN ultima el plan militar para la retirada de los 'cascos azules' de Bosnia

Los 16 países miembros de la OTAN se disponen a aprobar el próximo miércoles el plan para proteger una eventual retirada de los 24.000 cascos azules destacados en Bosnia-Herzegovina, una decisión que, en cualquier caso, sólo podrá ser tomada por la ONU. Tras casi un año de tiras y aflojas -protagonizados por Francia y los países europeos, de un lado, y Estados Unidos, de otro-, los socios de la Alianza Atlántica han llegado a un acuerdo para enviar más de 60.000 soldados, apoyados por un grupo aeronaval, a la antigua república yugoslava si la misión pacificadora de las Naciones Unidas corre peligro, Sería la operación militar más importante puesta en práctica por la OTAN.La batalla política para ultimar el Plan 40.104 de la OTAN, también llamado operación Determined Effort (Esfuerzo Decidido), se cerrará previsiblemente el miércoles en la reunión del Consejo de la Alianza. La OTAN pretende recuperar así su maltrecho prestigio tras el fracaso de las últimas operaciones de castigo aéreo en Bosnia, que desembocaron en la crisis de los rehenes.

En el contingente de 60.000 soldados se incluyen los 14.000 cascos azules de los países de la OTAN destacados en Bosnia, que simplemente cambiarían el color de su casco; las tropas de la Fuerza de Intervención Rápida, unos 10.000 hombres, y los expertos en logística instalados en las bases de retaguardia de Croacia e Italia. La operación exigirá el apoyo de unidades aéreas y navales de la OTAN. Por ejemplo, España tiene comprometida la aportación de su Grupo Aeronaval, encabezado por el portaaviones Príncipe de Asturias.

Más de 60.000 hombres

Estados Unidos participará en la Operación Esfuerzo Decidido con unos 25.000 soldados; el Reino Unido, con 20.000; Francia, con 11.000; España., con 4.000; Alemania, con 2.000, y Portugal, con 800. En principio, el mando de la fuerza multinacional será confiado al comandante de la OTAN para el sur de Europa, en la actualidad el almirante norteamericano Leighton Smith, que dirigirá la operación desde Zagreb (Croacia) con el apoyo del comandante de los cascos azules, el general francés Bernard Janvier.

Sobre el terreno, la operación tendrá su cuartel general en Kiseljak, al norte de Sarajevo, que dirigirá el despliegue de la Fuerza de Intervención Rápida, al mando del general británico Michael Walker. Mientras tanto, en la sede de la OTAN en Bruselas, el general norteamericano George Joulwan mantendrá al corriente del desarrollo de las operaciones a los representantes de los países miembros de la Alianza.

A partir de la luz verde de las Naciones Unidas y en un plazo máximo de siete días estaría a punto la primera fase del Plan 40.014, que implicaría un periodo de entre cuatro y seis semanas para agrupar ytransportar a las tropas. Paralelamente, los cascos azules se concentrarían en torno a Sarajevo con ayuda de la FIR. Los destacamentos aislados en los enclaves musulmanes de Bosnia tendrían que ser evacuados en helicopteros.

En la segunda fase, de retirada propiamente dicha, el grueso del contingente llegaría a Bosnia desde Italia. En este momento, además del puente aéreo Sarajevo-Zagreb, la OTAN debería controlar las carreteras que enlazan Sarajevo con los puertos adriáticos de Split y Ploce, desde donde barcos de transporte evacuarían a los cascos azules hacia Bari y otros puertos italianos.

.El Plan 40.104 -más de 2.000 folios, incluyendo 24 anexos- estará al fin sobre la mesa del Consejo en Bruselas. El coste de la operación rondaría los 2.000 millones de dólares' (240.000 millones de pesetas), Aunque tradicionalmente los diplomáticos se conformaban con examinar un resumen de. los planes, en esta ocasión "se ha negociado palabra por palabra", según un negociador europeo, "primero en la estructura militar, luego en el plano político, y siempre bajo la presión de Francia, Reino Unido y España" que ya cuentan con tropas sobre el terreno.

Francia, que abandonó la estructura integrada en 1966, ha vuelto a participar en un plan militar de la OTAN. Pero al mismo tiempo, le ha aprovechado de su particular estatuto en la Alianza para, imponer sus puntos de vista.