Tres heridos leves al estallar una potente bomba en una oficina bancaria de Pamplona

Tres personas, dos de ellas agentes del Cuerpo Nacional de Policía, tuvieron que ser atendidas de heridas leves en la Clínica San Miguel, de Pamplona, tras la explosión de una potente bomba colocada en un banco sobre las tres de la madrugada.El artefacto produjo importantes daños en la sucursal que el Banco Hipotecario tiene en el número 30 de la avenida de Bayona, y la rotura de cristales y puertas en varios comercios y viviendas del barrio de San Juan. Este barrio es una de las zonas de diversión nocturna de la ciudad.

El artefacto estaba fabricado con una olla de aluminio en cuyo interior había dos kilos de amonal, amerital y pólvora prensada, así como un cebo electrónico y un temporizador.

Según la Delegación del Gobierno en Navarra, la explosión se produjo poco después de las 3 de la madrugada cuando los agentes del equipo de artificieros estaban de camino a la sucursal.

Media hora antes, una mujer reivindicó telefónicamente en nombre de ETA a la asociación Detente y Ayuda, DYA, la colocación de una bomba en la avenida de Bayona. Una patrulla policial se dirigió a la dirección dada y comprobó la existencia, en la puerta del banco, de una bolsa negra. Pocos minutos después explotó sin que pudiera ser examinada por los expertos. Los dos agentes y un vecino tuvieron que ser atendidos de diversas molestias en los oídos y en el costado.

Por otra parte, en la localidad guipuzcoana de Hernani, un grupo de desconocidos quemó en la noche de ayer el vehículo particular de un agente de la Ertzaintza (policía autónoma).

Medidas de seguridad

Las medidas de seguridad para los ertzainas destinados en lugares considerados de riesgo (Rentería, Getxo, Portugalete, San Sebastián, etc) fue uno de los asuntos abordados en una reunión mantenida por los representantes de la Ertzaintza con el consejero de Interior, Juan María Atutxa. El viceconsejero José Manuel Martiarena explicó las medidas adoptadas en el caso de los ertzainas de Rentería, esto es, la repartición de vestuario (botas, buzos y guantes).Interior y los sindicatos acordaron convocar de inmediato el Comité de Seguridad e Higiene, paralizado en estos momentos, para intensificar las medidas de seguridad ante el recrudecimiento de los ataques radicales.