Bosnia renuncia a jugar contra Yugoslavia a causa de la escalada bélica en los Balcanes

No habrá partido: Bosnia no jugará contra Yugoslavia si no lo remedia las presiones de última hora de la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA). El potencial de Yugoslavia en este deporte es tan importante que la FIBA organizó la repesca que ayer empezó a disputarse en Bulgaria con la única intención de hacer posible la participación de los yugoslavos en el próximo Campeonato de Europa, del 21 de junio al 2 de julio en Atenas, que por la misma causa ha sido modificado y ha pasado de 12 a 14 participantes.La delegación bosnia, cuyo seleccionador es el ex jugador del Real Madrid Mirza Delibasic, presentó el martes por la noche una carta a la FIBA, en la que el Gobierno de su país les prohibe enfrentarse a Yugoslavia debido el recrudecimiento de la situación bélica y el reciente asesinato del ministro de asuntos exteriores bosnio.

La renuncia de la selección bosnia a disputar el partido de hoy será castigada con un marcador de 0-20 para Yugoslavia y la no adjudicación del punto que se otorga a cada equipo que pierde un partido. Aún así, Bosnia es favorita a ocupar, tras Yugoslavia, la segunda plaza que da derecho a participar en el próximo Europeo ya que sobre el papel tiene mejor equipo que el resto de participantes: Bulgaria, Turquía y Estonia. En la primera jornada de ayer estuvo a punto de saltar la sorpresa. Yugoslavia tuvo que esperar hasta la prórroga para acabar venciendo por 93-87 a Bulgaria.

A pesar del conflicto bélico y de la renuncia de Bosnia a enfrentarse a Yugoslavia, los jugadores de ambas selecciones, algunos de los cuales habían formado parte del mismo combinado antes de la disgregación de las repúblicas balcánicas, comparten el mismo hotel en Sofía. Sus relaciones son hasta cierto punto normales y no rehúyen el diálogo cuando coinciden, ya sea en el comedor o en los pasillos del hotel Moscú de Sofía.

Además de la carta oficial, la delegación bosnia entregó a la FIBA una segunda carta, escrita a mano, en la que se pedía que no se permita que Yugoslavia utilice con la bandera, el himno y los símbolos de la República. La selección yugoslava se encuentra en Sofía al completo, con estrellas como Danilovic, Djorjevic, Paspalj o Savic, y tan sólo está ausente VIade Divac, pívot de Los Lakers. El seleccionador yugoslavo es Dusan lvkovic, entrenador del Panionios de Grecia, y su ayudante, el actual técnico del Madrid, Zeljko Obradovic.

Hace ya tres años que Yugoslavia no puede participar en los grandes acontecimientos del baloncesto: no estuvo en los Juegos Olímpicos de 1992, ni en el Europeo de 1993 ni tampoco en el Mundial de 1994. La FIBA, siguiendo las directrices de la ONU en materia de embargo deportivo, había excluido de todas sus competiciones. a la selección yugoslava tras el Europeo que ganó en Roma en 1991.