Inspección ocular del "crimen de Alcásser"
La investigación del triple crimen de Alcásser condujo ayer a una nueva visita de la fosa de la partida de La Romana, en el término municipal de Tous, en la que aparecieron los cuerpos de Miriam García, Antonia Gómez y Desirée Hernández en enero de 1993. Ricardo Anglés, hermano de Antonio -presunto asesino de las niñas-, fue llevado a la fosa para una inspección ocular, ya que el pasado abril declaró en el juzgado de Catarroja que había cavado una fosa en la zona para ocultar una moto robada, según explicaron ayer fuentes judiciales. El Joven, acompañado por su hermano Roberto, explicó ayer ante el juez de Alzira que su hermano Antonio le obligó, bajo amenazas, a terminar de cavar esa fosa, en la que escondieron una moto. Ricardo Anglés afirmó que el hecho sucedió en 1991, al menos un año antes de la desaparición de las tres niñas, en noviembre de 1992.
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