Los ministros escoltan a Leguina en la 'batalla de Madrid'

El presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, es un líder nacional del PSOE muy peculiar. Sus declaraciones trascienden las inexistentes fronteras de un territorio en el que gobierna desde hace 12 años. Leguina mantiene que estas elecciones municipales y autonómicas son "las más significativas" para los socialistas entre todas las que se podían convocar. Su teoría es que el PSOE, precisamente ahora, se la juega como partido en 13 autonomías y 8.043 municipios con "su muestra más representativa" de varios miles de candidatos, y no sólo con Felipe González y unos cuantos ministros, en los que, sin embargo, se apoya.Por esa razón Joaquín Leguina pidió, dice que ingenuamente, que los líderes nacionales del PP, el PSOE e IU no se implicaran en esta campaña. Nadie respondió a su órdago y se jugó otra mano: la de sus ministros. El gabinete de Felipe González lo forman 17 personas, sólo cuatro de ellas nacidas en la capital de España.

Leguina explicó ayer, en presencia de Juan Manuel Eguiagaray, titular de Industria, que, como todos los ministros viven necesariamente en Madrid, no es complicado que crucen la acera y le echen una mano en su cruzada anti-PP. Eguiagaray no eludió el capotazo y presumió de militancia: "Ser ministro es una cuestión accidental en la vida, pero no es tan fácil renunciar a mis ideas socialistas y nadie me puede quitar que quiera apoyar a mis compañeros de proyecto".

El ministro aprovecho una comparecencia preparada para dar a conocer un proyecto de respaldo interautonómico a las pequeñas y medianas empresas -denominadas pymes-, que el día anterior firmó con Juan José Lucas en la Comunidad de Castilla y León (PP), para atacar el sinsentido, según su criterio, de las reformas fiscales y laborales que prepara el PP estatal de José María Aznar.

En resumen, para Eguiagaray, los populares son los partidarios de Juan sin Tierra, y los socialistas, los seguidores de Ricardo Corazón de León.