"No se pierden empleos porque las fronteras estén abiertas"

Desde el pasado 1 de mayo, el primer piso del edificio William Rappard, sede de la Organización Mundial de Comercio, (OMC). en, Ginebra tiene un nuevo inquilino Ministro de Comercio de Italia embajador, errante del grupo Fiat y una carrera diplomática en Moscú, Washington y Bruselas, ahora, Renato Ruggiero se ha convertido en el guardián del libré comercio en el mundo. Los que le conocen dicen de este napolitano de 65 anos recién cumplidos, alias Rocky Ruggiero, preocupado por la sabiduría y la honestidad y un liberal convencido en cuanto al comercio se refiere, que es un negociador duro y perspicaz. Cualidades que, sin duda, necesitará para defender al frente de la OMC los intereses de los cerca de 70 países que la integran.Pregunta. Tras nueve meses de duras negociaciones para elegir uno de los. tres candidatos a la dirección de la OMC, ¿siente ahora que cuenta con el apoyo de todos los países incluido EE UU, que fue el principal opositor?

Respuesta. Como buen napolitano, ya las he olvidado. Son cosas. que pasan rápido. Quizá no pasen si no ganas, pero he ganado y ya no cuenta. He sido uno de los principales amigos de Estados Unidos. Mi elección la he celebrado con su embajador en Roma con una gran cena la semana pasada. Y con Mickey Kantor [secretario de Comercio estadounidense], le aseguro? que he tenido conversaciones muy amistosas.

P. ¿Cuáles son los proyectos que tiene para la OMC?

R. Continuar con lo que se ha hecho durante los últimos 50 años. Es decir, promover el libre cambio en un marco multilateral. También hay otros marcos, como el bilateral y el regional, pero al final todos deben confluir en el. sistema multilateral, que es la fuerza que ha conducido al comercio a su gran éxito como motor del crecimiento económico mundial.

P. ¿Por qué muchos países especialmente los industrializados se resisten a la apertura, si van a obtener tantos beneficios?

R. Hay muchas razones,, pero la más importante para mí es que la opinión pública e incluso los responsables políticos en nuestros países no se. han dado cuenta de cómo ha cambiado el mundo. Coja por ejemplo el vínculo entre el paro y el comercio. Si preguntara a la gente de la Europa occidental, dirían que la relación es negativa. Le dirán que pierden empleos porque las fronteras están abiertas.

P. ¿Y no es un poco cierto?

R. Es un, error enorme y le voy a decir por qué. En 1994, un año en que la crisis no fue muy grande, Europa occidental exportó 265.000 millones de dólares e importó 135.000 millones de dólares. ¿Qué quiere decir esto? Que quizá hemos perdido puestos de trabajo, no cualificados pero hemos aumentado el empleo en puestos de trabajo cualificados. En esta última recesión el motor que nos ha sacado de la crisis han sido los países en vías de desarrollo. La opinión pública no percibe esta realidad y una de las misiones de esta organización debe ser hacer entender que el mundo ha cambiado y que en el futuro, el crecimiento en nuestros países dependerá a menudo del de los países asiáticos y latinoamericanos y espero también, que de muchos países de África.

P. Pero ante el problema de la deslocalización de muchas empresas aun teniendo beneficios, ¿qué se puede decir a las personas que se quedan en paro?

R. Le aseguro que no es cierto que cuando se hacen inversiones en otros. países se disminuye el empleo en los nuestros. Más bien lo contrario. Las inversiones. en otros países disminuyen los costes de producción de las industrias que producen en nuestros países, lo que permite salvar puestos de trabajo que de otra manera no hubiéramos podido salvar. No hay que dar al comercio responsabilidades que no tiene, al contrario : Es la innovación' tecnológica, quizá, la responsable principal, pero en este caso ¿usted piensa que hay que paralizar la evolución tecnológica para defender el empleo?

P. ¿Qué deben hacer los países?

R. Debemos tener una economía mucho más flexible. Hacer una reforma estructural y cambiar especialmente en Europa occidental, la formación de nuestros jóvenes para adaptarla a las necesidades de la sociedad y de la economía. No debemos tratar de defender los empleos donde hemos perdido la competitividad, debemos intentar aumentarlos donde somos competitivos.

P. Dadas las dificultades para concluir la Ronda Uruguay debido a los intereses entre las grandes potencias, ¿cree que tiene margen de maniobra como director general de la OMC?.

R. No es una cuestión de margen de maniobra, es una cuestión de cómo ve cada uno su deber. Yo me he comprometido a ser el director de todos los países y seré el director de todos los países, y lucharé porque todos los compromisos que se han. adoptado se respeten.P. Con los cambios económicos ¿teme que se produzca un retorno al proteccionismo? R. Ciertamente, pero sería muy peligroso. Pienso que hay tensiones proteccionistas y tentaciones en los campos del bilateralismo y el regionalismo. Es el combate, que habrá que llevar a cabo día a día, tratando de persuadir a la gente de que la liberalización del comercio puede hacerse de varias formas, siempre confluyendo en lo multilateral, ya que sólo mediante la no discriminación se alcanza el bienestar de la sociedad.P. Uno de las cuestiones más polémicas en la Ronda Uruguay fue el peligro del dumping social. ¿Se está debatiendo esta cuestión?R. No hubo un acuerdo porque no se sabe muy bien lo que. se quiere. Ahora se está discutiendo en la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) y en la OCDE. Espero que podamos tener averiguar cuál es su vínculo con el comercio. En mí opinión hay una cosa clara, el proteccionismo. no puede resolver este problema. Se crean barreras que son otras, barreras entre los países ricos y, los pobres, se frena el crecimiento y, por tanto, se agudizan más las tensiones.