Los Verdes y la PIE se convierten en alternativas
Al margen de los tres partidos con representación institucional en Madrid, otras dos formaciones han irrumpido en el panorama político local y autonómico con alguna posibilidad de plantear batalla, quizá formar grupo político y convertirse entonces en bisagra de complicados pactos poselectorales.Los Verdes-Grupo Verde estarán encabezados en la capital por Ana Isabel Silva, y en la Comunidad, por Humberto da Cruz, ex director del Icona y dirigente de la Federación de Amigos de la Tierra. Presentan candidaturas con ciertas posibilidades en otros 12 ayuntamientos de la región.
En la Comunidad propugnan destinar el 1% del presupuesto para programas de ayuda al Tercer Mundo. Favorecer la participación de entidades ciudadanas en los consejos de administración de Telemadrid y de la emisora autonómica Onda Madrid. Suprimir los espectáculos taurinos. Crear tres nuevos parques regionales (sierra norte, valle del Lozoya y suroeste metropolitano). Ampliar la línea de tren a Móstoles e impedir el tren veloz Madrid-Valladolid. Reformar la ley electoral para poder confeccionar listas abiertas y extender por la región los cultivos de agricultura ecológica y de las especies y razas autóctonas.
En el Ayuntamiento intentarían regular las viviendas desocupadas, gravando fiscalmente los pisos vacíos y las segundas propiedades. Además, apoyarían el cierre de la Casa de Campo a los vehículos privados y limitarían este tráfico también en el casco, con carriles para bicis y autobuses. Los Verdes quieren crear una red municipal de voluntarios sociales, dar más dotaciones a las patrullas verdes de la Policía Municipal, aumentar los departamentos de medicina natural, recortar el horario laboral y, en proporción, los salarios.
El programa de la Plataforma de los Independientes de España (PIE), que lleva como número uno municipal al polémico Ángel Matanzo y en la autonomía al doctor Alfonso Cabeza, empieza prometiendo erradicar la delincuencia, el comercio público de drogas y la venta ambulante ilegal. Para acabar con "el actual caos circulatorio", la PIE propone que el pago de multas por infracciones de tráfico se compense al ciudadano. con el mismo importe en bonos para transporte público. Esta plataforma pretende eliminar las zonas RED, la ORA y "cualquier otra fórmula de pago por utilización de la vía pública", y devolver al uso ciudadano los aparcamientos reservados a organismos oficiales y entidades públicas y privadas. En la unidad ecológica de la Policía Municipal se reservaría un amplio cupo de plazas para objetores de conciencia que quieran, así cumplir con el servicio militar sustitutorio.
La PIE suspendería de forma radical cualquier implantación de más hipermercados. Limitaría las funciones de Mercamadrid al ámbito mayorista y convertiría las juntas de distrito en miniayuntamientos de barrio.
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