Mayor Oreja da su palabra de honor de que no ha intentado ningún contacto con ETA o IHB
El presidente del Partido Popular en el País Vasco, Jaime Mayor Oreja, comprometió ayer su palabra de honor para acreditar que nunca ha intentado establecer un contactodirecto con representantes de ETA ni ha pedido la mediación de nadie para establecer un diálogo con IHB. Mayor reveló que poco antes de las jornadas de debate organizadas por Elkarri, los pasados días 9 y 10 de marzo un amigo personal próximo al Partido Nacionalista Vasco le envió una carta en la que le advirtió que los terroristas "van a por vosotros", y le recomendó que el Partido Popular asistiera al citado debate.
Los principales dirigentes del PP en el País Vasco y Madrid reaccionaron ayer con indignación a la afirmación hecha por el portavoz del PNV, Joseba Egibar, acerca de que el PP intentó entrar en contacto con ETA tras el asesinato de Gregorio Ordóñez, cometido el 23 de enero. La afirmación de que ese intento de "tomar la temperatura a ETA" se produjo fue ayer ratificada por el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, en declaraciones a Euskal Telebista."Eso es una pura falsedad", replicó Mayor Oreja en declaraciones a este diario. "No hay ningún intermediario al que yo haya dicho que quería hablar con alguien de HB. No he hecho nunca una llamada en ese sentido. Y estoy seguro de que nadie de HB me va a desmentir. Lo que está diciendo Egibar es pura intoxicación, quizá porque le han intoxicado a él. En todo caso, es una falsedad. Doy mi palabra de honor".
El presidente del PP del País Vasco relató que cuatro días antes de que comenzaran las jornadas de debates organizadas por Elkarri recibió una carta. "Era de un amigo, de una persona próxima al PNV. Me decía algo así: 'Quiero que sepáis que van a por vosotros'. Y luego añadía: 'Sería conveniente que asistierais a la conferencia de Elkarri. No es una encerrona. Debíais ir'. Yo no contesté a la carta ni descolgué el teléfono para hablar con quien me había enviado la carta.
Sólo descolgué el teléfono para advertir de su contenido a José María Aznar y a Francisco Álvarez Cascos".
Un amigo personal de Mayor Oreja, José Luis López de la Calle, ex militante del PCE y ahora simpatizante del PSOE, relató ayer que el día del funeral por Gregorio Ordóñez le llamó una persona, que él conocía, y le animó a almorzar juntos. Durante la comida, le aseguró que "ETA estaba derrotada". López de la Calle le contestó que si los datos que le estaba aportando eran ciertos y si, efectivamente, su interlocutor era portavoz "de ese mundo" habría otras personas interesadas en conocer esa versión. "En ese momento", relató ayer López de la Calle, "cometí el error de citar el nombre, entre otros, de Jaime Mayor y de Ramón Jáuregui".
"Posteriormente", agregó López de la Calle, "esa persona me volvió a llamar y me dijo, a título personal, que quería conocer a Jaime Mayor, a lo que yo le dije que rotundamente no, porque todo lo que me había dicho, a la vista de los acontecimientos y del propio comunicado de ETA, era mentira".
"Quiero dejar claro", concluyó López de la Calle, "que Jaime Mayor, de toda esta historia, no sabe nada y que todo fue justamente al revés de como lo cuenta Egibar. Fui yo quien se negó a dar ningún recado a Jaime. Fui yo quien se negó a ser emisario de esa persona ante Jaime Mayor, a quien, por cierto, no veo desde hace seis o siete meses. Es absolutamente incierto que haya hecho ninguna gestión".
El secretario general del PP declaró, por su parte, que la afirmación del portavoz del Partido Nacionalista Vasco "está fuera del mundo real", y agregó que al PP le resulta muy difícil "demostrar la falsedad de lo inexistente". Según él, la explicación de las declaraciones de Egibar, ratificadas ayer por Iñaki Anasagasti, portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, se encuentra en que los nacionalistas vascos se han embarcado en una estrategia de intoxicación.
En esa misma línea, el portavoz popular en el Congreso de los Diputados, Rodrigo Rato, lamentó que "el PNV intente sembrar confusión para difuminar el fracaso de su estrategia política, y en ese sentido deberían ser capaces de, si se equivocan, asumir sus propias responsabilidades sin crear infundios sobre los demás. Ha cometido el error de dar audiencia a quienes no respetan la vida de las personas y ahora pretende encontrar excusas, cuando lo que debería hacer es tener la valentía de reconocer sus propios errores y rectificar".
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