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Aparecen en Alicante los cadáveres de los etarras Lasa y Zabala, según 'Deia'

Los cadáveres de José Antonio Lasa Arósteguí y José Ignacio Zabala,. militantes de ETA desaparecídos en Bayona (País Vasco francés) en octubre de 1983, han sido. localizados en el depósito del cementerio municipal de Alicante, según informa en su edición de hoy el diario vasco Deia.

En una una información firmada por José Félix Azurmendi, el rotativo vasco afirma que el médico forense de San Sebastián, Francisco Etxeberria Gabilondo, certificó el pasado 17 de marzo que los dos cadáveres localizados en Alicante, donde habían sido enterrados ilegalmente hace 10 años, corresponden a los de los dos etarras, cuyo secuestro y muerte se atribuye a los GAL. Ambos cuerpos presentaban orificios de bala en la cabeza.

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Los dos cadáveres se encontraban en el depósito municipal de Alicante desde 1985, año en que fueron localizados en un lugar no precisado de la provincia. Hasta el momento, los restos mortales no habían sido identificados ni reclamados. Por medios que el diario Deia no revela, las madres de Lasa y Zabala supieron de a existencia de estos cadáveres sin identificar y sospecharon que podrían corresponder a los de sus hijos.

El pasado día 11 de marzo se pusieron en contacto con el forense Etxeberria Gabilondo, profesor del Instituto Vasco de Criminología de la Universidad del País Vasco, que procedió a examinar los cadáveres y concluyó que corresponden a los etarras desaparecidos en octubre de 1983. Para la identificación de los cadáveres, el doctor Etxeberria recabó información a los familiares sobre las características de las piezas dentales de ambos jóvenes.Víctimas de los GALLasa y Zabala desaparecieron el 16 de octubre de 1983. El automóvil en el que viajaban fue hallado en Bayona con las puertas abiertas y su familia nunca dudó que habían sido secuestrados. La desaparición de ambos jóvenes ha sido investigada infructuosamente por el Juzgado número 1 de San Sebastián, que ordenó registros en varios puntos de Euskadi para intentar localizar los cadáveres. En 1988 la investigación judicial se cerró.

La desaparición de ambos etarras siempre se ha considerados como la primera acción de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) que se darían a conocer dos meses después, en el mes de diciembre, con el secuestro en Hendaya de Segundo Marey. Dos días después de la desaparición de Lasa y Zabala, la policía española intentó secuestrar Francia al etarra José María Larretxea para canjearlo por el capitán de Farmacia Alberto Martín, secuestrado por ETA político militar-VIII Asamblea. Este intento fracasó al intervenir la policía francesa. Los agentes españoles fueron detenidos y devueltos a España. El cadáver del capitán, Martín fue hallado con un tiro en un bosque próximo a Bilbao el 19 de octubre de 1983.

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