Odette Hallowes, heroína francobritánica de la resistencia
Odette Hallowes, una de las más célebres heroínas de la II Guerra Mundial, falleció el pasado día 13, a los 82 años, en su domicilio de Surrey, en el suroeste de Londres, pero siguiendo sus instrucciones sus familiares no anunciaron su muerte hasta después de la celebración de sus funerales.Nacida en Amiens el 28 de abril de 1912, Odette Hallowes, cuyo apellido de soltera era Brailly, se instaló en Inglaterra n 1931 tras su matrimonio con un británico. En 1942 se enroló en el Cuerpo de Operaciones Especiales y fue enviada a Francia en 1942 con la misión de establecer una red de resistencia en Auxerre y más tarde en Cannes.
En 1943 fue detenida por la Gestapo y sufrió interrogatorios y torturas en la prisión de Fresnes (París) antes de ser internada en el campo de Ravensbruck. En 1946, se le entregó la George Cross, la medalla más importante concedida a un civil por valor demostrado y que por primera vez se otorgaba a una mujer. En el documento acreditativo se decía: "La Gestapo la torturé con hierros al rojo vivo, y luego le arrancó las uñas de los pies. Pero se negó a hablar y su decisión salvó la vida de dos oficiales que pudieron continuar su labor en la Resistencia".
En 1950 un filme, Odette, sobre sus experiencias de guerra, protagonizado por Anna Neagle, terminó de consagrarla como heroína nacional. Sin embargo, una historia oficial del Cuerpo de Operaciones Especiales aparecida en 1966 reducía su papel afirmando "que el valor militar de sus operaciones fue escaso". En cualquier caso, ella afirmó desde el primer momento: "Nunca he sido ni muy fuerte ni muy valiente; sólo soy una mujer sencilla y normal que está muy contenta de haber vuelto a casa con sus hijas".
En 1947, contrajo de nuevo matrimonio con otro británico, Peter Churchill, que había sido su jefe en Francia. En 1955 se divorciaron y el año siguiente ella volvió a casarse con otro agente de las Operaciones Especiales, Geoffrey Hallowes
