¡Vaya gangas!

Están en lo más alto del escaparate internacional. Se han convertido en un negocio redondo para sus clubes, al tiempo que han avalado a sus mentores, los llamados ojeadores. Poyet llegó a Zaragoza tras fracasar en la segunda división francesa y estuvo tres años cobrando siete millones. En el Valencia, muy pocos cobran menos que Mijatoyic (43 millones anuales). EL PAIS ha seleccionado diez de los casos más significativos: Penev, Mijatovic, Salenko, Poyet, Djukic, Mauro Silva, Kodro, Popov, Radchenko y Jokanovic. ¿Quién los recomendó? ¿Cómo fueron fichados? ¿Cuánto costaron? ¿Qué valen hoy en día?LUBOSLAV PENEV

Compro por 100, vendo por 400

Así lo quiso su tío

Dimitar Penev, seleccionador de Bulgaria, impidió que el Valencia fichara de una tacada en el verano de 1989 a dos de los mejores delanteros del mundo: Luboslav Penev y Hristo Stoichkov. Esa era la intención del Valencia, según recuerda el ex presidente Arturo Tuzón, "pero en aquellos tiempos era muy difícil sacar a jugadores de los países del Este y nos trajimos sólo a Penev porque así lo quiso su tío". El Valencia pagó por Lubo 100 millones de pesetas. Penev tiene la ficha más alta de la plantilla (110 millones por temporada) y termina contrato el próximo mes de junio. Tras superar un cáncer testicular el pasado verano, su cotización ha descendido y su continuidad en el Valencia está en el aire. Así todo, su precio ronda los 400 millones.

PEDRAG MIJATOVIC

Compro por 500, vendo por 1.000

El vídeo no miente

El otro legado extranjero de Tuzón fue Pedrag Mijatovic, el hombre que el de julio de 1993 firmó un contrato por cuatro temporadas con el Valencia. Un acuerdo que el tiempo permite considerar muy ventajoso para el club: 4.200.000 dólares (unos 500 millones de pesetas) y una cláusula de rescinción de 1.000 millones de pesetas. El sueldo del jugador es uno de los más bajos del equipo, 43 millones anuales. "Vicente Silla, ex consejero del club, me enseñó unos videos de un Jugador serbio", explica el entonces secretario técnico Bernardo Pérez Pasieguito, "y me fui de inmediato a por él a Be1grado". La cotización del montenegrino ha subido como la espuma y sobrepasa los 1.000 millones.

OLEG SALENKO

Salario mínimo. Vendido por 300

La primera apuesta de Roig

Cuando Oleg Salenko llegó al Logroñés, en 1993, aceptó cobrar sólo el salario mínimo interprofesional: 58.500 pesetas. En mayo de ese año y gracias a va rios goles seguidos logró un aumento de saldo: 400.000 pesetas al mes. Luego, años más tarde, Salenko fue el primer extranjero de la era Roig. La operación se cerré el pasado verano: 300 millones de pesetas al Logroñés. En cualquier caso, el máximo goleador del pasado Mundial, con una claúsula de 800 millones de pesetas, ha pasado buena parte de la primera vuelta en el banquillo.

DIMITRI RADCHENKO

Compro por 197, vendo por 650

Una contratación polémica

Jamás en sus 83 años de existencia el Racing había contratado a un crack de la categoría internacional de Dimitri Radchenko. La afición cántabra lo entendió así y bien pronto encumbró a su delantero a la categoría de ídolo. Radchenko, 24 años, es uno de los pocos jugadores del Rácing seguidos por los ojeadores. Jun to al carrilero Luis Fernández y al meta Ceballos, forma el trío de traspasables. Radchenko costó 197 millones de pesetas y cumple su segunda temporada en el Rácing. Arribó de la mano de Juan Vergara, responsable de la empresa Gestisport, de Bilbao, que controla casi en exclusividad el mercado deportivo ruso para España. Dimitri Radchenko tiene un contrato anual de 27 millones de y una cláusula de indemnización de 750. El Rácing se ha preocupado mucho de airear, en un claro propósito de ponerle a la venta y hacer que su cotización suba, que por Radchenko se interesaron desde el Southampton, Leeds United y Boca Juniors, hasta el Parma o el fútbol francés. Más de un club ya desmintió categóricamente su interés. El Rácing asegura que no le traspasará por 400 millones de pesetas, cifra que se insinuó podría ofrecer alguno de los citados y fijó el precio en 650.

DIMITRI POPOV

Compro por 110, vendo por 500

Pleno redimiento

Dimitri Popov, 26 años, destaca mucho más que Radchenko pero, paradójicamente, no parece haberse revalorizado. Popov es más rentable y brillante que su compañero y no da la impresión de que se interesen por él los intermediarios. Costó 110 millones de pesetas, su contrato está entre 20 y 22 millones de pesetas y se halla mucho más integrado en la plantilla. Popov está habitualmente más cerca de su rendimiento, es un jugador rentable, con frecuentes brotes de exquisiteces técnicas, y, aunque los clubes no preguntan por él, su cotización se acerca a los 500 millones.

GUSTAVO POYET

Compro por 35, vendo por 400

Un paquete con sorpresa

El Real Zaragoza buscaba en el verano de 1990 un delantero centro rompedor a la vieja usanza, "como Felipe Ocampos", repetía José Ángel Zalba, entonces presidente de la entidad. La grave si tuación económica que atravesaba el club impedía la contrata ción de un jugador consagrado, así que el uruguayo Ildo Maneiro, que acababa de incorporarse como entrenador, propuso el fichaje de un compatriota de 21 años completamente desconocido, Gustavo Poyet. Apenas tres días después se presentaba en la capital aragonesa un jovencísimo jugador, tan alto como carente de masa muscular. Su ficha era de 21 millones de pesetas por los tres años. El Zaragoza se movía en las posiciones de descenso mediada la temporada, lo que provocó el relevo de Maneiro por Víctor Fernández. El técnico aragonés dio instrucciones al preparador físico para que Poyet trabajara su condición física, ganara masa muscular y mejorara la coordinación de sus movimientos. Desde entonces, hasta convertirse en el máximo goleador del Zaragoza y uno de los hombres más rentables del equipo. Firmó finalmente por 35 millones anuales, con una cláusula de rescisión de 400 millones de pesetas.

SLAVISA JOKANOVIC

Compro por 156, vendo por 300

El deseo de Antic

Slavisa Jokanovic fue el primer gran deseo cumplido por Radomir Antic en el Oviedo. Sólo había un problema, pero casi insalvable. Los directivos del Partizán se negaban rotundamente a desprenderse de Jokanovic, después de traspasar a su otra gran figura, Mijatovic, al Valencia. A finales de julio de 1993, el espigado centrocampista se presentó de incógnito en Oviedo y asistió a la presentación de la plantilla, pero desde la grada para no agravar aún más la situación. A partir de ese momento, el Oviedo forzó la negociación, con el hecho consumado de la negativa de Jokanovic a volver a jugar en el Partizán. 15 días después, con la Liga ya empezada, Eugenio Prieto cerró el fichaje, que oficialmente supuso un desembolso para el Oviedo de 156 millones, aunque todo parace indicar que fueron 300. Su cotización se acerca a los 500 millones.

MEHO KODRO

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La frustración de Toshack

En apenas cuatro años, la Real Sociedad ha multiplicado por cinco el valor de Meho Kodro, un delantero bosnio que llegó a San Sebastián para curar la frustración de John Toshack. El técnico galés se había desvivido por el mexicano Luis García, pero Jesús Gil se interpuso en su camino. Con la urgencia propia del caso, a Toshack le pusieron encima de la mesa el nombre de Kodro, un goleador espigado del Velez Mostar. La Real Sociedad abonó unos 150 millones de pesetas al Velez Mostar y Kodro se dispuso a hacer olvidar a John Aldridge, el cañonero galés que resucitó la contratación de extranjeros en la Real Sociedad. En el día de hoy, Kodro cuesta 700 millones de pesetas y su clausula de rescisión se incrementa en 50 millones cada temporada.

MILOSLAV DJUKIC

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Un fino conductor de excavadoras

Miloslav Djukic se ganaba la vida en Serbia conduciendo máquinas excavadoras. El fútbol fue su oportunidad para forjarse un porvenir, aunque en 1990, cuando el segundo entrenador del Deportivo, Carlos Ballesta, viajó a la antigua Yugoslavia en busca de un libero para ascender a Primera División, Djukic, con 24 años, aún no había pasado del modesto RAD de Belgrado. Ballesta se quedó prendado al instante del porte majestuoso de aquel defensa. Faltaban sólo unas semanas para el final de la Liga y el Deportivo le contrató por un sueldo de 2,5 millones de pesetas. Los gallegos subieron a Primera y lo compraron definitivamente tras pagar por él 30 millones. La primera ficha del serbio en La Coruña fue de nueve millones anuales, más que un conductor de excavadoras pero un salario irrisorio para un extranjero en una de las ligas más ricas del mundo. Desde entonces la fama de Djukic traspasó fronteras y el club también tuvo que engordarle la ficha, que ahora ronda los 40 millones anuales. Hace dos temporadas se habló insistentemente del interés del Sampdoria por contratarle, que al parecer ofrecía 1.000 millones. Su compromiso con el Deportivo es hasta 1997, pero Cruyff suspira por llevárselo al Camp Nou para sustituir a Koeman.

MAURO SILVA

Compro por 250, vendo por 1.000

El primer gran fichaje

Mauro Silva llegó a La Coruña en 1991, cuando el Deportivo peleaba desesperadamente por la permanencia en Primera. El futbolista confesaría después que sintió un escalofrío al pensar en la posibilidad de jugar en Segunda. Pero era su ocasión para desembarcar en Europa y decidió arriesgarse en un equipo hasta entonces completamente desconocido en su país. Con 23 año" Silva ya se había hecho un nombre en Brasil. Aunque jugaba ea el modesto Bragantino, Parreira le había otorgado un puesto de titular indiscutible en la selección brasileña. Fue el primer gran fichaje de Lendoiro: pagó por él 250 millones de pesetas, casi un disparate para un equipo al borde del descenso. Sólo unos meses más tarde los emisarios del calcio se agolpaban en la ventanilla del Deportivo. Estaban dispuestos a triplicar su precio, que ha seguido subiendo tras lograr con Brasil el Campeonato del Mundo. Su ficha actual rebasa los 55 millones de pesetas.