Dos latigazos 'fulminan' al Madrid B
Dos latigazos fulminaron al Madrid en poco más de seis minutos. Faltaba un cuarto de hora para el final, el conjunto blanco dominaba, se permitía florituras y daba rienda suelta a su imaginación cuando apareció el mago Iván de la Peña, un marciano en el césped de la Ciudad Deportiva. Con un pase medido desde el centro del campo, entregaba a Toni el gol que significaba el empate. Y es que Iván no la pega. Suelta latigazos precisos, colocando el balón en cada uno de los paraísos que inventa. Ayer rompió el partido.El gol de Toni sembró los nervios en las filas madridistas. Donde había temple y saber hacer, aparecía la inseguridad, la falta de convicción. El tanto de Toni operó en sentido inverso entre los blaugrana, otorgando señorío a Iván y sus amigos. A diez del final llegaba el segundo latigazo: Jon Bakero, emulando a su hermano mayor, hacía gala de una inusitada potencia de salto y marcaba el gol de la victoria.
El partido en su conjunto fue del Madrid B. Los frecuentes robos de balón en el centro del campo propiciaron numerosas salidas a la contra del bloque de ataque blanco. Pero Javi López y Dani desperdiciaron demasiadas ocasiones, más de las que se puede permitir un equipo en apuros. El Barcelona, sin embargo, rentabilizó sus llegadas.
En otro encuentro de Segunda: Hércules, 1; Osasuna, 0.