Conchita sigue firme en Melbourne

Conchita Martínez parece decidida a asegurar la plaza que la lógica le concede en la final del Open de Australia de tenis. La aragonesa, segunda cabeza de serie, sigue avanzando con paso firme. Ayer superó la segunda, ronda al vencer a la alemana Veronika Martinek por 6-1 y 6-3. La jornada ofreció pocas sorpresas. Los cabezas de serie salvaron sus partidos a excepción de la alemana Sabine Hack (13ª).El partido de Conchita duró alrededor de una hora. Pero la aragonesa se quejó al final de molestias en el cuello que le impidieron ejecutar su revés con eficacia. "He recibido tratamiento y parece que todo va mejor", comentó. Conchita, sin embargo, aprovechó bien la potencia de su. derecha para ir cortando las alas a Martinek.

La española se enfrentará en la próxima ronda a la holandesa, Kristie Boogert, que sorprendió, a su compatriota Manon Bollegraf. Boogert ocupa el puesto 54º de la clasificación mundial. Por tanto, hasta el momento Conchita no ha tenido un cuadro nada fácil, a pesar de que lo ha resuelto con soltura.

La primera cabeza de serie, Arantxa Sánchez Vicario debe enfrentarse esta mañana a la estadounidense Tami Whitlinger, 59ª mundial. Arantxa y Conchita son las candidatas a disputar la final de este torneo que se celebra en Flinders Park, en Melbourne.

Hasta el momento, siete cabezas de serie han sido eliminados ya en el Open de Australia. Entre los hombres, Boris Becker (3º), Goran Ivanisevic (4º) y Marc Rosset (12º). En el cuadro femenino, Gabriela Sabatini (5ª), Magdalena Maleeva (9ª), Sabine Hack (13ª) y Julie Halard (16ª). Maleeva debía encontrarse con Arantxa y Halard con Conchita en los octavos de final.

Ayer, Pete Sampras, Michael Chang, Michael Stich, Jim Courier, Andréi Medvedv y Magnus Larsson se aseguraron la tercera ronda. Sampras precisó 1 hora y 16 minutos para derrotar sin pro blemas al eslovaco Jan Kroslak, tres minutos más que en la prime rá ronda ante el italiano Gianluca Pozzi. Para el primer jugador mundial, las mayores dificultades comenzarán dentro de dos rondas, en los octavos de final, donde puede cruzarse con el sueco Magnus Larsson.

Por su parte, Jim Courier, que regresó al circuito en enero ganando en Adelaida tras dos meses de vacaciones, parece haber recuperado la forma que le permitió ser el primer tenista mundial en 1992. "Pasé unas vacaciones maravillosas", comentó. "Desde 1990 no, me había tomado un descanso tan largo. Pero era necesario que meditara sobre mi futuro". Courier tendrá un difícil encuentro con en la tercera ronda ante el australiano Woodforde.