La Delegación del Gobierno sanciona a 22 pueblos por incumplir el reglamento taurino

Pitos y bronca, y también multas. Los municipios madrileños no han salido por la puerta grande durante la pasada temporada taurina. La Delegación del Gobierno ha sancionado a 22 pueblos a lo largo. de 1994 por incumplir el reglamento al celebrar festejos, encierros, capeas y corridas. Este organismo está alarmado. por el aumento de las sanciones respecto al año anterior, ya que 1993 concluyó con 13 expedientes. "La tendencia al alza es alarmante", señaló un portavoz de la Delegación del Gobierno. Las sanciones oscilan entre 100.000 y un millón. de pesetas.

Los municipios castigados tienen ahora un mes de plazo para recurrir las multas después de que la Delegación del Gobierno rechazase las primeras alegaciones. En la lista de pueblos multa dos figuran las siguientes localidades: Paracuellos del Jara ma, Camarma, Valdeavero, San Agustín de Guadalix, San tos de la Humosa, Parla, Lega nés, Mejorada del Campo, Torres de la Alameda, Lozoya del Valle, Valdetorres del Jarama, Perales de Tajuña, Villalbilla y Valdelaguna.

La lista se completa con otros ocho municipios que han sido también sancionados pero todavía no tienen notificación. Por este motivo, la Delegación no difunde dé momento los nombres de estos agraciados en el reparto de castigos.

Paracuellos del Jarama ha recibido la sanción más alta, un millón de pesetas, por maltratar a los animales. El alcalde de esta localidad, Pedro Antonio Mesa (independiente), conoció ayer el castigo impuesto a su municipio.

Según un portavoz municipal, la sanción obedece a que "durante las fiestas un toro fue sacrificado fuera de los toriles". "Lo ocurrido no fue una negligencia, sino que se mató al toro fuera porque era imposible meterlo a los toriles", añadió dicho responsable.

Sin embargo, la Delegación del Gobierno ha desestimado las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento de Paracuellos, que ahora ha anunciado la presentación de un nuevo recurso.

Espectáculos fuera de lugar

Los municipios de Camarma, Valdeavero, San Agustín de Guadalix y Santos de la Humosa han recibido una sanción de medio millón de pesetas por celebrar espectáculos taurinos en el campo y fuera de los recintos establecidos. En estas localidades se acorrala a los toros con caballos, coches y motos.

El toro embolado de Torres de la Alameda ha sido castigado con 250.000 pesetas, de, multa. Este municipio, en cambio, no tiene constancia de la multa de 1994. "Sabemos que tenemos la multa del 93 pero no la del año pasado", manifestó un representante del Ayuntamiento.

Localidades como Parla y Leganés, multadas en 1993, aparecen de nuevo en la lista de pueblos castigados el año pasado por excederse en el tiempo que tienen que durar los encierros.

El concejal de Seguridad de Parla, José María Díez, reconoce que el reglamente establece un tiempo límite de dos horas. "Nos pasamos un poco más porque tuvimos problemas para encerrar a los toros en el cajón", justifica. "Hemos recurrido y espero que nos quiten la multa de 100.000 pesetas", añade.

También han sido multados pueblos como Perales de Tajuña, por el toreo de reses sin autorización; Valdelaguna, por celebrar una novillada con picadores sin permiso, y Villalbilla, por no dar muerte a la res al final. del festejo.

Tradición y castigo

La temporada 1994 fue el segundo año en que se aplicó en la región el nuevo reglamento de espectáculos taurinos. Al principio del año pasado el Departamento de Asuntos Taurinos de región celebró un encuentro con los alcaldes de la región para intentar reducir la lista de 13 pueblos sancionados en 1993. Sin embargo, a la luz de los datos, el encuentro no parece haber servido para mucho. Según Pedro Mora, director de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid, en. algunas, ocasiones la ley choca con la tradición y los pueblos son multados.