Impulso colectivo
Los mercados de valores concluyen esta irregular semana confirmando que el dinero, más que por expectativas, se mueve por impulsos, al menos en las plazas secundarias. Wall Street caía casi 50 puntos en la jornada del jueves y ayer llegó a ceder 30 poco después de la apertura, debido a los avisos lanzados por los responsables de la Reserva Federal sobre una posible subida de los tipos de interés, aunque las justificaciones del momento han utilizado cualquier argumento susceptible de poner nervioso a un inversor.La orientación de las cotizaciones ha sido negativa en todos los mercados, incluso en Alemania, en donde se conocía un excelente dato de inflación que, junto con el crecimiento del PIB en el último trimestre y el descenso del paro, perfilan un panorama económico libre de obstáculos. Francfort terminó cediendo un 0,68% ante el ambiente negativo impuesto por la Bolsa norteamericana. París bajaba un 0,88% y Londres el 1,21%. La actividad sufrió un retroceso importante respecto de las jornadas anteriores, situándose en 18.818 millones de pesetas efectivas. La volatilidad del mercado que sirve de guía al resto, Wall Street, que tras los altibajos cerró finalmente ayer con una ganancia de 5,38 puntos a 3.691,11, es una de las explicaciones de la negativa de los inversores a asumir riesgos.
El índice general de Madrid perdía un 0,69% y en las tres sesiones de esta semana gana el 0,06%. El Ibex 35 cedió un 0,75%.
