La patronal madrileña pide nuevas reglas de juego para acabar con la corrupción

Fernando Fernández Tapias, presidente de la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (CEIM), se sumó ayer al ministro Borrell y pidió a los empresarios que no paguen comisiones. El dirigente patronal abogó por profundizar en la ética y "regenerar la vida pública y la vida empresarial". Junto a sus críticas a la corrupción, Fernández Tapias denunció "la invasión de cometidos que no les corresponden" por parte del Gobierno, los jueces y los medios de comunicación.

El discurso de Fernández Tapias ante la asamblea general de la patronal madrileña (CEIM), que representa a 40.000 empresarios, se convirtió en una ácida crítica política. "Si hay algo peor que la crisis económica", dijo, es la crisis en las instituciones". Una situación que, dijo, está provocada por "los escándalos de corrupción y los casos de comisiones fraudulentas".Posteriormente el presidente de CEIM valoró el llamamiento del ministro Borrell y las afirmaciones de Manuel Fraga Iribarne, presidente de la Xunta, quien ha propuesto "borrón y cuenta nueva". Fernández Tapias sugiere: "Cambiar las reglas de juego y poner fin a las corrupciones y a las comisiones que afectan al mundo empresarial".

El dirigente patronal responsabilizó al Ejecutivo por ir a remolque de los acontecimientos", aunque reconoció que ha dado un primer paso al reconocer que existe "un clima de corrupción y de alteración de las reglas de juego de la actividad económica que ha degradado los pilares básicos de la convivencia social".

Pero Sus críticas no pararon en el Ejecutivo y denunció una especie de invasión de instituciones y sectores en cometidos que no les corresponden". Fernández Tapias dio estos argumentos: "El Gobierno no puede entrar en decisiones que corresponden al legislativo; el legislativo no puede ni debe sustituir al Gobierno; el Poder judicial debe juzgar y velar por la aplicación de las leyes, pero no gobernar ni legislar; y los medios de comunicación deben informar de los hechos y denunciar las desviaciones o abusos de poder, pero sin convertirse en gobernantes, legisladores o jueces".