El debate de la línea 10 del metro vuelve a empezar

La concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, desenterró ayer el hacha de guerra por el trazado de la línea 10 de metro entre la estación de Príncipe Pío y Lago. Aguirre sorprendió con una opción que permite soterrar las vías del metro en todo ese recorrido por sólo 500 millones más del presupuesto de la obra (3.600). "Sólo hay que desviar un colector municipal, una obra ya prevista en los presupuestos de inversiones de 1995, porque cuando llueve se desborda y da problemas" explicó la edil, entusiasmada con la solución.

Aguirre lleva 15 meses poniendo trabas al proyecto de la Consejería regional de Transportes de desviar la línea 10 de metro para que conecte en el mismo andén con la línea 6 en la multiestación de Príncipe Pío (en obras). Tras una reunión entre el alcalde, José María Álvarez del Manzano, y el presidente de la Comunidad, Joaquín Leguina, parecía cercano el acuerdo: el municipio aceptaría un puente sobre el río Manzanares y la M-30 y la tala de 14 árboles (plátanos) de la Casa de Campo.El debate volvió ayer a empezar. Aguirre afirmó que en una reunión entre técnicos municipales, regionales y de la construtora encargada de la obras, Dragados y Construcciones, llegaron a la conclusión de que la solución subterránea era viable y sólo 500 millones más cara. El consejero de Transportes, Julián Revenga, afirma, sin embargo, que esa solución ni es viable ni cuesta ese dinero. "Esperanza Aguirre. desautoriza al propio alcalde y reabre la polémica por intereses ,personales", espetó Revenga. "Esa solución ya se había barajado y des echado por dificulta des técnicas", afirma, "habría que subir el cauce del Manzanares entre el puente del Rey y el de los Franceses y modificar los sistemas de psclusas y los puentes". Revenga afirma que Dragados señalaba en un informe que esa opción costaría "500 millones más, aparte de los adiciona les", que ascienden a 2.000 mi llones, según Revenga. "Que no se preocupe Revenga ni por el colector ni por el río, que eso se lo solucionamos nosotros", responde la edil de Medio Ambiente.

El pleno celebrado ayer trató, además, estos asuntos:Expropiaciones de la M40. El concejal de Urbanismo, José Ignacio Echeverría, afirmó que intentará pactar antes de fin de año las expropiaciones para cerrar la M-40 en el monte de El Pardo. El Ayuntamiento ofrecerá a los propietarios terrenos en Aravaca y Valdemarín.Oposiciones. El alcalde rechazó en el pleno de ayer que los grupos de la oposición (PSOE e IU) formen parte del tribunal que debe seleccionar a ocho subinspectores para la Policía Municipal. "Quiero un tribunal absolutamente profesional, sin decisiónes políticas", dijo.Tarifas del taxi. El pleno aprobó (con el voto en contra de PSOE e IU) las nuevas tarifas de taxi para 1995, que aumentarán un 4,25%, según el concejal de Circulación, José Antonio García Alarilla, que descuenta la subida (un 1% más) del IVA. La subida aprobada coincide prácticamente con la que había solicitado la Asociación Gremial del Taxi: la bajada de bandera pasa de 160 a 170 pesetas; el kilómetro recorrido, de 75 a 80, y se unifican los suplementos en 150 pesetas. El del aeropuerto pasa de 300 a 350. La hora de parada sube 50 pesetas (3, 1 %) en vez de las 100 que querían los taxistas.Cañada Real. Echevarría explicó ayer que el Ayuntamiento dará a elegir a las familias chabolistas de Cañada Real entre quedarse en el vertedero de Valdemingómez o trasladarse a otros terrenos más próximos al casco urbano. Echeverría añadió que si las familias eligen quedarse les construirán casas prefabricadas "mejores que las de otros asentamientos". Pero si prefieren el traslado a solares cuya ubicación reveló, su instalación sería más lenta, "aunque la operación no se demoraría más de seis o siete meses", informa Efe.Palacio de Hielo. El concejal de Obras, Enrique Villoria, aceptó no adjudicar definitivamente el Palacio de Hielo en tanto no se complete la documentación necesaria, como había solicitado el PSOE.