ORQUÍDEA Y MESA LLAMADAS LÓPEZ

La popularidad de José Ignacio López de Arriortúa, conocido como Superlópez, el alto ejecutivo vasco que presta sus servicios en la Volkswagen (VW), rebasa ya en Alemania las fronteras de la industria del automóvil. En Wolfsburg, la ciudad alemana donde se encuentra la casa madre de la multinacional Volkswagen, la propietaria de una floristería bautizó con el nombre de López una orquídea blanca conseguida a base de cruces y experimentos genéticos. Ayer, en la feria del mueble de oficina de Colonia, una conocida empresa del ramo presentó una nueva mesa a la que el propietario de la firma denomina modelo López. Superlópez no para y parece haber olvidado los malos ratos de la investigación judicial, todavía abierta, por presunto espionaje industrial en su anterior empresa, la General Motors, al marcharse a VW. Anteayer se reunió por la noche con los corresponsales españoles en Alemania para anunciarles su plan de crear una nueva empresa, hija de VW, con el objeto de difundir y poner a disposición de otras empresas sus métodos de adiestramiento y racionalización. Ayer por la mañana, en la feria de Colonia, acudió a la presentación de la mesa de trabajo López y por la noche tenía prevista una conferencia en Biarritz. Hoy pensaba estar de vuelta en Wolfsburg para asistir a la reunión del consejo de vigilancia de VW, que se ocupará del análisis de la auditoría de Seat y que casi con seguridad le costará el puesto a un alto directivo de VW. El domingo, López no quiere perderse la votación en Euskadi. López y su grupo de ejecutivos, llamados los guerreros, han conseguido sacudir la modorra que adocenaba al personal de VW con sus ideas sobre la tercera revolución industrial aplicadas en los grupos de trabajo KVP elevado al cuadrado. Estas siglas alemanas corresponden en español a un denominado proceso de mejora continua, pero elevado al cuadrado.-