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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Credibilidad

El pasado miércoles 14 de septiembre tuve ocasión de escuchar las declaraciones de José María Aznar al término de la comparecencia del presidente del Gobierno ante el Congreso de los Diputados. El señor Aznar afirmaba que tal intervención había sido decepcionante, "después de ocho años de no haberlo hecho" (sic). Tal vez convendría recordarle que durante su entero mandato (más de dos años) como presidente de la Junta de Castilla y León, su presencia en la Cámara regional fue casi nula, y que tan sólo en tres ocasiones se dirigió a la Cámara desde la tribuna de oradores. Tenemos, pues, que el señor Aznar se despidió no sin antes asegurar que "el problema de González es que su palabra no vale nada; no es creíble".Quizá sea así; no obstante, también quisiera recordar ciertos hechos, a modo de muestra, que otorgarán a la palabra del señor Aznar la validez y el crédito que, indudablemente, merece: en el programa de gobierno presentado por el Partido Popular en su undécimo congreso (con anterioridad a las elecciones legislativas de 1993) se proyectaba autorizar la construcción de nuevas centrales nucleares, interrumpida por la moratoria nuclear. Sin embargo, en el debate con Felipe González emitido por Tele 5 en directo el 31 de mayo de 1993, días antes de las elecciones, a la pregunta que González le formuló en los siguientes términos: "Centrales nucleares, ¿sí o no? ¿Y dónde?", el señor Aznar replicó rotunda e inequívocamente: "No". En mi opinión, el líder del PP temía que una respuesta afirmativa, qué se correspondería con el contenido de su propio programa, le hiciese perder votos, además de obligarle a proponer alguna localidad para la ubicación de nuevos reactores nucleares, lo cual podría restarle un mayor número de votos.Conclusión: a la vista de esto, que cada cual juzgue el crédito que le merece la palabra del señor Aznar y la confianza que se le puede conceder.

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