Mercado neutro
Los mercados financieros han entrado en una fase en la que todo el mundo parece esperar tiempos mejores. El problema es que tanto compradores como vendedores viven con esa ilusión y ninguno de ellos arriesga el mínimo movimiento. Ayer, la Bolsa mantenía el nivel del negocio en mínimos anuales hasta media hora antes de concluir la sesión, pero algunas aplicaciones y la evidencia de que los precios no iban a caer elevaron la contratación hasta los 19.570 millones de pesetas efectivas. La situación en Europa también mostraba una gran indecisión, con Francfort cediendo terreno hasta bajar un 0,84% y Londres y París con avances del 0,61% y 1,26%, respectivamente.Una de las claves del comportamiento indeciso de los inversores españoles estaba en la repetición de tipos de interés por parte del Banco de España, una decisión que para muchos operadores significa mantener la inestabilidad en ese campo por unos cuantos días más, a pesar de que las expectativas apostaban por el mantenimiento del precio del dinero en el 7,35%.
Los precios en el mercado de deuda pública también mostraban la ausencia de expectativas claras respecto de las próximas sesiones, ya que comenzaron perdiendo altura para recuperarse ligeramente a lo largo del día. Al cierre de la sesión las rentabilidades habían aumentado ligeramente. Ya en los últimos minutos, la tranquilidad que se disfrutaba en Wall Street, se rompió con la bajada de 3,48 enteros en el índice compuesto y cerró a 251,46 enteros. El Ibex 3 5 subió el 0, 51 %.