Ofensiva guerrista para que González impida un nuevo congreso en Huelva

Los guerristas están dispuestos a ejercer todo tipo de presiones sobre el secretario general del PSOE, Felipe González, para que no prospere la iniciativa del secretario de organización, Ciprià Ciscar, de anular el congreso de Huelva en la reunión de la ejecutiva federal del próximo lunes. Los guerristas andaluces consideran que la reunión de Ciscar con la ejecutiva regional, celebrada el jueves, no sólo no ha mitigado la crisis interna, sino que la ha recrudecido. Desde el lado renovador, se insistía en que la decisión final será adoptada por "la mayoría" del partido.

Los guerristas elevaron ayer el tono de sus amenazas con el fin de influir en la reunión del lunes, en la que Ciscar defenderá que se anule el congreso de los socialistas onubenses y se convoquen, congresos extraordinarios en Granada y Almería. En cuanto a Málaga, la solución es mucho más complicada, ya que si bien se descarta la anulación del congreso, sí se piensa dar una respuesta a las impugnaciones renovadoras.

Fuentes de la ejecutiva regional descartaron la convocatoria de un congreso extraordinario en esta provincia y se decantaron por buscar otras fórmulas de entendimiento en las que primen "el respeto a las reglas de juego".

El secretario regional y presidente de la Junta, Manuel Chaves, adelantó ayer que "no habrá vencedores ni vencidos" tras la reunión del lunes e intentó restar protagonismo al papel de González sobre la decisión última: "No tiene por qué ser una decisión de González, sino colegiada de todo el partido".

Ciscar se mostró el jueves inflexible en cuanto a los criterios a seguir para pacificar el PSOE andaluz: primero aplicar la vía estatutaria, restaurar la legitimidad de la dirección regional y luego entablar un diálogo provincia a provincia. Todo lo contrario de lo que piden los guerristas, que reclaman un acuerdo global en Andalucía.