Jacques Chirac toma la iniciativa en la carrera por la presidencia francesa
El gaullista Jacques Chirac, alcalde de París, ha comenzado a dar pasos inequívocos para tratar de convertirse en candidato a la presidencial en las elecciones de 1995. En una arriesgada maniobra, Chirac pretende tomar la iniciativa frente a su colega de partido, el primer ministro Édouard Balladur. La lucha entre los jefes parece estar servida. Mientras, Francia asiste perpleja a las revelaciones sobre el pasado político de François Mitterrand y sus flirteos con la derecha cuando está a punto de finalizar su mandato como presidente.
Frente a las consignas del entorno del primer ministro, que pretendían que se dejara al Gobierno trabajar, Chirac no ha querido esperar. El Gobierno de Balladur quería evitar a toda costa adelantar la lucha por la designación de candidato presidencial a las elecciones previstas para mayo de 1995.Presionado por sus amigos, preocupados por las encuestas que muestran a Balladur como el candidato mejor situado para suceder a François Mitterrand, el presidente del RPR (Agrupación para la República), lanzó su candidatura en un agresivo discurso que pronunció el sábado por la noche en Burdeos. Chirac dijo que estaba preparado para aplicar su "energía" en lo que calificó de "gran debate nacional".
Chirac hizo durante su intervención ante una audiencia de jóvenes seguidores del RPR una velada alusión a su amigo y discípulo Balladur. "Hay que dejar que las ambiciones salgan a la luz, es algo humano", dijo el alcalde de París.
El ministro francés de Exteriores, Alain Juppé, secretario general del RPR, mostró públicamente su respaldo a la candidatura de Chirac, en lo que supone un abierto desafío a su primer ministro, que reiteró sus instrucciones de no referirse al debate electoral antes de enero.
Mientras tanto, la izquierda, que asiste divertida a la pugna entre Chirac, de 61 años, y Balladur, de 64 años, confía en que el presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, a punto de concluir su mandato, acceda a convertirse en su candidato. Por ahora, Delors, de 69 años, mantiene en secreto sus intenciones.
Coincidiendo con los primeros escarceos en la carrera por la presidencia, el actual ocupante del palacio del Elíseo, el socialista François Mitterrand, ha vuelto a ocupar un lugar bajo los focos. Las revelaciones sobre las afinidades derechistas del joven Mitterrand se incluyen en un libro publicado por el periodista Pierre Pean, que reproduce por primera vez una fotografía que muestra a Mitterrand con el mariscal Pétain, el jefe del Gobierno colaboracionista de Vichy durante la ocupación nazi.
Hasta ahora sólo habían circulado rumores acerca del encuentro entre Mitterrand y Pétain. La fotografía, tomada a mediados de octubre de 1942, proporciona la prueba que faltaba. Irónicamente, la imagen fue proporcionada al autor del libro por el propio Mitterrand. El presidente francés sostuvo numerosas entrevistas con Pean e incluso proporcionó al biógrafo documentos de primera mano y facilitó el nombre de testigos para acontecimientos cruciales.
Preguntado por el motivo de que Mitterrand se mostrara tan franco a sus 77 años, Pean manifestó que pensaba que el presidente quería salvar del olvido aquello que pudiera ser interesante para la historia, y sobre todo prefirió contar él mismo su propia historia antes de que otros la escriban en su ausencia. "La hora ha llegado, el final de su segundo mandato de siete años", declaró Pean. "Al igual que otros, Mitterrand se mantuvo fiel a Pétain, pero acabó uniéndose a la resistencia para combatir al régimen", añadió el periodista.
En su libro, titulado Una juventud francesa. François Mitterrand, 1934-1947, Pean documenta la afinidad de Mitterrand con ideales de la extrema derecha años antes del comienzo de la II Guerra Mundial y su amistad con el jefe de la policía de Vichy, René Bousquet, que fue asesinado el año pasado.
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