La policía egipcia dice haber abatido a tres de los terroristas que asesinaron a un niño español

La policía egipcia aseguró haber abatido ayer a tres de los autores del atentado perpetrado el viernes de la pasada semana contra un autobús en el que viajaba un grupo de turistas españoles en el Alto Egipto, en el que perdió la vida el español Pablo Usán San Ambrosio, de nueve años de edad. El Ministerio egipcio del Interior emitió ayer un comunicado en el que además asegura haber desmantelado una organización que preparaba nuevos ataques.

Los tres presuntos "terroristas" fueron localizados accidentalmente en el curso de una redada desatada, para capturar al responsable de la muerte de dos guardias ante una iglesia de la localidad de Qalaf, a más de 500 kilómetros al sur de El Cairo.Los tres presuntos autores del ataque contra el autobús de turistas españoles se habían refugiado en el cementerio de la ciudad de Sohag. La policía les rodeó y los tres fueron abatidos en el tiroteo que se desencadenó a continuación. Uno de ellos fue identificado como Achrf Afi Salem, estudiante de la facultad letras de Sohag que estaba fichado como uno de los lugartenientes de Talaat Yasine Haniman, antiguo jefe de la Gammá Islamiya (Agrupación Islámica) muerto en marzo pasado en un choque armado con la policía.

Los otros dos integrantes del comando eran, siempre según la nota oficial del Ministerio del Interior que no pudo ser contrastada por fuentes independientes, Mansur Mohamed Said y Sotulii Afi, también estudiantes y a los que se les imputan varios atentados anteriores contra las fuerzas de seguridad.

La policía descubrió varios fusiles, un revólver, munición, dos aparatos de radio y dos maquinas para hacer fotocopias en el lugar en que fueron abatidos los tres, terroristas.

En el curso de la misma operación, las autoridades egipcias aseguran haber detenido a otros 20 presuntos militantes islámicos que intentaban organizar un nuevo grupo radical que ya tenía previsto cometer varios atentados.

La Gammá Islamiya se atribuyó el sábado el atentado en el que murió Pablo Usán. Su padre, Leopoldo Usán, de 46 años, viajó a España con una bala alojada en el abdomen. La madre de Pablo, Inmaculada San Ambrosio, de 44 años, sufrió una herida de bala en un pie, al igual que Julio Ponce, de 40 años. El autobús en que viajaban fue atacado en el Alto Nilo, una región a la que se recomienda moverse con escolta policial. Según los primeros testimonios de los turistas españoles, el autocar fue atacado por un grupo de cuatro o cinco hombres que descargaron fusiles y ametralladores contra el vehículo.

Al asumir la responsabilidad del ataque, la Gamaá IsIamiya amenazó de muerte a todos los extranjeros que se aventuren a viajar a Egipto. El anuncio adquiere una especial trascendencia en este momento, ya que El Cairo albergará a partir del lunes la Conferencia de la Población organizada por las Naciones Unidas, y está prevista la asistencia de unos 6.000 delegados de todo el mundo.