El concierto de los guindillas

"Estamos contentos de tocar en este festival porque hay buenas bandas y eso significa que va a ir un público al que le gusta la buena música. Además, queremos que se nos vea en Madrid". Ésta es la disposición anímica de la formación catalana Sopa de Cabra ante el concierto que hoy se celebra en la plaza de toros de las Ventas. Pasadas las siete de la tarde, el grupo dispondrá de 45 minutos para hacerse notar entre la audiencia madrileña.Si ya era un concierto con dos platos fuertes y unos teloneros interesantes, hace apenas 48 horas se unió. al cartel el grupo madrileño Tribu X. Ellos serán los primeros en saltar al ruedo de Las Ventas. Su actuación empezará a las 18.30 horas y es previsible que toquen para un escaso público puesto que muchos no estarán alertados del cambio de hora de este pequeño festival del nuevo rock.

Doctor Music, organizador del evento, no las tenía todas consigo a últimas horas de la tarde de ayer. El número de entradas vendidas tenía la culpa. Pese a que el cartel es suficientemente atractivo , el precio de las entradas -3.200 pesetas- puede ser disuasivo y, sobre todo, teniendo en cuenta que el concierto se realiza a la vuelta de las vacaciones veraniegas. "Hemos vendido entre el 60 y 70% del aforo de la plaza, calculado en 18.000 personas", aseguraba ayer un portavoz de los organizadores sin querer implicarse demasiado en el asunto.

Se esperaba que a última hora se animaran algunas centenas más de roqueros. A estos se unirán los que ya ayer emprendieron el viaje hacia Madrid. En los dos puntos de ventas oficiales en San Sebastián y Barcelona se vendieron cerca de 3.000 entradas. Se calculaba también que unos 500 fans de otras ciudades llegaran por sus propios medios.

El plato fuerte de la noche será Red Hot Chili Pepers, una de las bandas más importantes de la actualidad. Éste es su momento. Los noventa son de esta banda californiana tan crucial. No están de gira, el álbum que les dio la popularidad, Blood sugar sex magic, es de hace dos años pero han elegido expresamente Madrid para uno de los contados conciertos que este verano están ofreciendo: hace 15 días brillaron con luz propia en el barro de Woodstock y el pasado domingo clausuraron el festival de Reading en Inglaterra. Para acompañar la contundencia de su música, que está prevista que comience a sonar a las diez y media de la noche, mostrarán una gran esfera de luces de una tonelada de peso que con sus movimientos y reflejos sobre el escenario consigue ambientes psicodélicos.

Los escoceses Primal Scream que saltarán a Las Ventas una hora y media antes que ellos, no les van a la zaga. Continuadores del más puro sonido Stones, Primal Scream son un abreboca serio.

Precediendo a escoceses y californianos, tocarán los Sopa de Cabra, una de las bandas sobrevivientes de la última oleada del rock en Cataluña. Musicalmente, Sopa de Cabra vierte las influencias de sus escuchas adolescentes: los sonidos de los setenta. "En cierto modo coincidimos con toda la movida de Seattle. Nosotros también crecimos con grupos como Led Zeppelin o Aerosmith. A nosotros no nos importa que lo que hagamos no sea algo nuevo, porque lo que nos interesa es que tenga vida y energía. Somos más de vísceras. En ese sentido, Red Hot Chili Peppers tiene el punto de ser un grupo descarado que va a su rollo", aseguraban ayer tras su llegada a la capital. En Mundo infierno, su cuarto álbum, coincidente con el fichaje por una multinacional, el grupo interpretó todo su contenido en castellano en un intento de abrir mercado en el resto de España. En Al.Lucinosi, recientemente publicado, el catalán ocupa la totalidad de sus mensajes. "No se trata de un regreso al catalán o un recurso al castellano, nuestra realidad es alternar las lenguas que conocemos para utilizarlas como vehículos de expresión".

Red Hot Chili Pepers, Primal Seream, Sopa de Cabra y Tribu X actúan hoy en la plaza de toros de Las Ventas. Apertura de puertas a las 18.00 horas.