Una doble protesta contra los trasvases y la autovía causa un gran atasco en la N-III

Unas 300 personas cortaron ayer durante dos horas la carretera nacional Valencia-Madrid a su paso por el embalse de Contreras, entre Valencia y Cuenca. Ecologistas manchegos y alcaldes y vecinos de la comarca conquense del Cabriel se unieron para protestar por el trazado elegido para la autovía Valencia-Madrid -que pasará por las Hoces del Cabriel, un paraje de alto valor ecológico- y los trasvases. Las retenciones, de siete kilómetros, encresparon a los conductores que regresaban de vacaciones. Ecologistas y alcaldes acabaron discutiendo entre sí, pero coincidían en el culpable: el ministro de Obras Públicas.La Guardia Civil no intervino en las dos horas que duró la protesta, que comenzó a las once de la mañana. Hubo momentos de tensión cuando algunos automovilistas protestaron por tener que soportar el atasco bajo el sol.

Todos los concentrados mantienen que la mejor opción para el mencionado tramo de la autovía es la llamada alternativa A, que aprovecha el actual trazado de la Nacional III y pasa por el embalse de Contreras. Esta opción ha sido descartada por Borrell, tras conocer informes técnicos sobre movimientos de tierras.

Los ecologistas, reunidos en la coordinadora en defensa del río Cabriel, protestaban, sobre todo, por la solución elegida finalmente por el Ministerio de Obras Públicas para el tramo Caudete-Minglanilla de la autovía de Valencia a Madrid.

Obras Públicas ha optado por la llamada Opción C, con una ligera variación. Se trata de la alternativa meridional, que pasa cerca de las Hoces del Cabriel, una paraje de alto valor ecológico y paisajístico.