Aparcamiento en Fuencarral

Deseo acogerme al derecho de réplica para responder al artículo publicado por ustedes el sábado 25 de junio Fuencarral consulta a los vecinos la ubicación de un aparcamiento, para puntualizar lo siguiente:

1. El Ayuntamiento decide, sin consultar con los interesados, construir un aparcamiento en un fondo de saco de unos 14 metros de ancho que se encuentra rodeado por seis bloques de 13 plantas, cuando a poco más de 60 metros dispone de un espacio libre y sin arboleda (la ubicación que nosotros proponemos).

2. Los vecinos empezamos a manifestar nuestra oposición, contra esta decisión del concejal de Fuencarral hace ocho meses, y él no sólo ignaró nuestras quejas, sino que las ocultó a sus superiores. De esta manera se llegó a adjudicar la obra a una empresa sin tener en cuenta la opinión en contra de los vecinos.

3. Ante la terquedad municipal decidimos manifestamos en la calle. Cuando la situación se hace insostenible para el señor Martín Vela, nos propone realizar una encuesta para juzgar el grado de aceptación del lugar elegido por nosotros (naturalmente, no anula su decisión, ya tomada, con respecto al fondo de saco).

4. Los vecinos nos oponemos a la encuesta por considerarla una manipulación. Esta oposición es la que ha motivado el que se hayan recibido 40 contestaciones a sus 5.500 envíos.5. La encuesta no consta de una, sino de cuatro preguntas, y no está realizada por profesionales del estudio del mercado, sino por aficionados, por lo que resulta oscura y tendenciosa.6. El señor Martín Vela y su equipo, en un supremo alarde de precisión y de rigor, han enviado la encuesta a vecinos que viven junto a La Vaguada y que para llegar al aparcamiento tendrían que andar medio kilómetro y cuesta arriba.

7. La encuesta tiene que entregarse personalmente en la concejalía del distrito de Fuencarral. Si en unas elecciones generales vota poco más del 50% de los ciudadanos, imaginen cuántas respuestas obtendrá el concejal.

Por último, todo este problema tiene su origen en una pertinaz falta de comunicación del señor concejal con los vecinos. Además de ocultar nuestras múltiples quejas a sus superiores, el señor Martín Vela mantiene aquella vieja costumbre de "mantenella y no enmendalla" que pudo ser eficaz en otros tiempos, pero que en una democracia conduce únicamente al fracaso.-

Presidente de la Asociación de Vecinos de Altamira.