El área de bosque asolado por fuego en lo que va de año dobla lo destruido en 1993
Hasta el pasado 28 de julio, se han quemado 108,45 hectáreas de área arbolada en la Comunidad de Madrid, una superficie similar a 100 campos de fútbol. En el mismo periodo de 1993, sólo ardieron 20,02 hectáreas de bosque. Por tanto, el área arbolada perdida este año se ha multiplicado por cinco; o bien: ha doblado todo lo que se quemó en 1993 (51,64 hectáreas) ¿La causa? Un mayo lluvioso y una tremenda sequedad en junio y julio, según el responsable de la lucha contra incendios de la Comunidad, Jorge Murtra.
Jorge Murtra, el responsable de Protección Ciudadana de la Comunidad de Madrid -y por tan to de la extinción de incendios explica que mayo fue muy lluvioso y generó lo que él llama "combustibles vegetales ligeros", es decir, un pasto que crece rápido, y se seca con la misma rapidez hasta convertirse en pura yesca.En el caso de este año, Murtra dice que el calor se ha adelantado como nunca y que junio y julio han sido extremadamente cálidos y secos, hasta el punto que una chispa de una hoguera puede organizar un incendio pavoroso. Es como si la temporada de riesgo extremo se hubiera adelantado. El número de incendios forestales en julio fue de 72. En ellos ardieron 250 hectáreas de superficie desarbolada y 15,35 de área con árboles. Aunque el mes que más se cebó con el bosque fue el de junio, en el que se perdieron 89 hectáreas de área arbolada. Si se comparan los mismos periodos de 1993 y 1994 (hasta el 28 de junio), este año han ardido 100 hectáreas más que el año pasado, sobre todo de bosque (108,45 frente a 20,62 de 1993. También se han declarado nueve incendios más (27 1) que el pasado año.
88.000 campos de fútbol
En 1993 desapareció, en toda España, una vegetación equivalente a 88.000 campos de fútboI. A Madrid le correspondieron 669. Una ínfima cantidad si se tiene en cuenta, además, que la superficie con algún riesgo de incendio en la región es de 648.241 hectáreas. Ardió un 1% de toda esa superficie, aproximadamente.
La eficacia en la lucha contra el fuego -que se mide, según Jorge Murtra, en superficie quemada dividida por el número de incendios- sólo fue superada el pasado año por tres provincias (Lugo, Pontevedra y Soria) y una región, Galicia. En Madrid, la superficie media perdida fue de 1,1 hectárea por incendio.
Este año, Madrid ha mejorado aún más este parámetro: 0,6 hectáreas de superficie media quemada en los resultados provisionales hasta el 15 de junio. Sólo le supera las provincias de Toledo y La Coruña.
De todos modos, los resultados en la lucha contra el fuego forestal han ido mejorando en la Comunidad desde 1991, año en que ardieron en Madrid casi 3.000 hectáreas. El dato de 1992 fue de 814 y el de 1993, 669. En donde se nota más el descenso es en la superficie arbolada. (602 hectáreas en 1991; 250 en 1992, 51,84 en 1993).
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