Bubka, una vez más

Serguei Bubka ha vuelto a su más alto nivel. El atleta ucranio ha batido una vez más su propia plusmarca personal de salto con pértiga, o lo que es lo mismo, el récord mundial, al elevarse en la mañana de ayer por encima de los 6,14 metros. Con este salto Bubka ganó un Ferran coupe valorado en unos 26 millones de pesetas. El coche era el premio que se ofrecía a quien lograse batir algún récord del mundo en este mitin atlético de Sestriere (Piamonte, Italia).Bubka, que había intentado en varias ocasiones mejorar los 6,13 metros logrados en septiembre de 1992 en Tokio, en, los Campeonatos del Mundo, acudió ayer a la pista de Sestriere, a 2.035 metros de altitud, con el único objetivo de superar esa marca y obtener así su 35º récord del mundo, el 17º al aire libre. Este año el saltador ucranio había estado menos prolífico que en anteriores temporadas y no conseguía batir sus propias marcas desde Tokio y desde que, en febrero de 1993, logró saltar 6,15 -en pista cubierta- durante una competición celebrada en Donetsk, su ciudad natal.

En San Petersburgo, durante los Juegos de la Buena Voluntad, su actuación fue decepcionante. Bubka no pudo superar, a causa del fuerte viento, los 5,70 metros, y fue segundo. Ahora, con esta nueva marca al aire libre, se han evaporado todas las dudas sobre el poseedor, durante los últimos diez años, de una clara hegemonía en el salto con pértiga. El saltador ucranio tuvo grandes dificultades para entrar en liza, no quiso ejercitarse sobre los 5,80. Los 5,90 los superó al primer intento. Y fue entonces, cuando sin más preámbulos, ordenó a los jueces que colocaran el listón a una altura que ningún ser humano había logrado superar, en pista al aire libre, hasta el momento. Bubka lo hizo en su primer intento. "Nunca ha bía tenido unas condiciones tan buenas para saltar como hoy. El viento ayudó muchísimo y hay algo en los lugares altos que favorece y hace más fácil lograr grandes marcas", declaró Bubka, que no participará en el Europeo de Helsinki, que comienza el próximo domingo.

Para mí es mejor no ir, es mentalmente muy difícil tener, que ganar todas las competiciones, grandes o pequeñas; en las que uno participa, así es que en esta ocasión no acudiré".

Bubka, que saltó a la fama mundial cuando en 1983 logró su primera medalla de oro en el Mundial de Helsinki, es el único atleta de la historia que ha logrado ganar, cuatro Campeonatos del Mundo en su especialidad. Sin embargo, y a pesar de su indiscutible liderazgo en los últimos tiempos, han llovido fuertes críticas contra él.

Bubka ha ido conquistando todas sus plusmarcas a de razón de un centímetro cada vez, con lo que consigue pingües beneficios de patrocinadores y premios como el que ayer logró: un Ferrari. El saltador se defiende diciendo que le gusta el deporte, y que la manera de estar motivado es ponerse siempre metas cortas.