Las derrotas de la ONU

"Nosotros, pueblos de las Naciones Unidas resueltos a preservar a las futuras generaciones del azote de la guerra...". Siendo el espectáculo del mundo el que es, la tentación de proclamar la derrota, por no decir el fracaso, del noble ideal asignado a la ONU( ... ) es grande. ¿Quién puede afirmar que, sin la existencia de la organización mundial, la guerra fría no se habría transformado en un enfrentamiento mucho más trágico que aquellos ( ... ) a los que dio lugar la competición entre el campo soviético, por una parte, y el de la libertad, por otra? ¿Por qué, entonces, un desencanto tal?.¿Por qué esta denuncia de la impotencia de la ONU? La decepción viene, sin duda, de que con el fin del mundo bipolar nació la esperanza de ver a la organización mundial jugar un papel más importante en la prevención de las amenazas contra la paz y en la acción por el respeto de los derechos fundamentales del hombre,. El conflicto bosnio, el atolladero somalí y, más recientemente, la apatía de los Estados ante el genocidio cometido en Ruanda, sin hablar de otros fracasos y torpezas, muestran dramáticamente los límites de la cooperacion internacional en materia de seguridad colectiva. ¿Hay, por ello, que reformar la ONU,, adaptarla al mundo que ha cambiado? Haría falta que los Estados se adhirieran sinceramente al sueño de una paz universal y otorgaran a una ONU transformada los medios de realizarlo. ¿No es utópica esta esperanza?

29 de julio