"Que controle Festina"

Miguel Induráin confirmó que los ataques que lanza Pantani en los kilómetros finales de cada etapa de montaña no le preocupan: "Es el equipo Festina quien tiene que controlar a Pantani, porque resulta una amenaza para sus corredores; a mí me da igual que pueda quitarme dos minutos cada día, porque le sigo llevando una diferencia importante. El peso de la carrera recae, sin embargo, sobre nosotros. Festina controla lo que puede pero me gustaría ver también algunos otros equipos trabajando, como el Castorama y el Carrera".El líder calificó la etapa reina como "nerviosa y dura por la sucesión de los puertos". Se decidió donde él esperaba, en la Madeleine: "Es uña subida propicia para atacar. Cuando lo hicieron Pantani y Virenque yo les respondí, porque si se escapaban podían tener peligro. Aún quedaba mucho recorrido y el descenso resultaba complicado. No era bueno, en mis condiciones, asumir riesgos en la bajada".

Para Induráin, el Tour terminará de decidirse mañana, en la cronoescalada, "donde sí puede haber diferencias importantes". En la etapa de hoy sólo encuentra dificultad en el control de la carrera, porque el trazado es sinuoso. Los tres puertos de primera no los considera de una dureza extrema, ni cree que contribuyan a abrir más huecos en la clasificación general: "Se acumulan los consumos de energías y el Festina está para mantener las ventajas, no para alterarlas. Será mañana cuando se juegue el podio del Tour".

El cambio de tiempo registardo en la carrera (35 grados hace dos días y 10 ayer en la meta) no ha afectado a Induráin: "Frío sólo se pasa en las bajadas", señala, "pero subiendo no afecta para nada. Es verdad que no nos convienen los cambios bruscos de temperatura, como los que está habiendo, pero para eso tomamos nuestras precauciones".