Muere el piloto de una avioneta cuando apagaba un incendio en Ciudad Real
Los incendios forestales se han cobrado una nueva muerte. Ricardo Luque Naranjo, piloto de una avioneta que participaba en las labores de extinción de un incendio en el término municipal de Valdemanco del Esteras (Ciudad Real), falleció ayer al estrellarse el aparato después de chocar contra una línea de tendido eléctrico. Con ésta son ya 21 las víctimas mortales de la oleada de incendios que desde hace una semana asuela España.
El accidente se produjo a la una de la tarde, cuando la avioneta monoplaza de tipo Dromeder, matrícula EC-VV, chocó contra una línea de tendido eléctrico en la carretera que une Agudo y Puebla de Don Rodrigo (Ciudad Real). El aparato se precipitó al suelo y se incendió. Ricardo Luque Naranjo murió abrasado.La avioneta, una de las tres que participaban en la extinción del incendio declarado media hora antes en esta zona de Ciudad Real, pertenecía a una de las seis bases de lucha contra incendios de Castilla-La Mancha y había sido alquilada por el Icona. El fuego fue extinguido poco después.
El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, aseguró ayer que la ayuda a los damnificados por los incendios y la recuperación del territorio son prioritarios para su Gobierno. Esto significa, según dijo, que se harán
cambios en los presupuestos, que pueden retrasar otras inversiones como "alguna carretera, centro de asistencia primaria o biblioteca". Según declaró, "la prioridad en este momento es hacer frente a los problemas de vivienda, alimentación, cortes de suministro eléctrico y de teléfono" que sufren las zonas siniestradas.
El presidente catalán reconoció -como ya hizo anteriormente la secretaria de Estado de Medio Ambiente, Cristina Narbona- que ha podido haber errores en la coordinación de los trabajos de extinción y prevención: "No descartamos que haya habido fallos por nuestra culpa". También hizo un inconcreto anuncio de revisar la política antiincendios seguida por su Gobierno.
Pujol negó que hubiese hablado el sábado con su homólogo valenciano, Joan Lerma, aunque sí lo hizo con algunos de sus colaboradores. El presidente de Cataluña afirmó que no se reunirá hoy con Lerma, aunque sí mantendrán contactos telefónicos, porque, según dijo, los problemas creados en las dos comunidades son comunes.
La consejera catalana de Gobernación, María Eugenia Cuenca, que visitó ayer las comarcas del Bages y del Bergueda, dijo que no es partidaria de que se declaren zona catastrófica las áreas de más afectadas porque esto podría retrasar la tramitación de las indemnizaciones. Cuenca se reunirá el martes con Pujol para evaluar los daños y analizar las ayudas necesarias a las zonas destruidas.
El vicepresidente de Gobierno, Narcís Serra, manifestó ayer en Barcelona que el Ejecutivo asignará al programa de reforestación de las zonas destruidas por los incendios "una gran parte de los fondos de cohesión previstos para España por la Unión Europea y destinados a la defensa del medio ambiente".
El ministro de Agricultura, Luis Atienza, comparecerá esta semana en la comisión correspondiente del Congreso de los Diputados para informar sobre el Programa para la Defensa contra los Incendios Forestales de 1994, con lo que previsiblemente no será necesario convocar a la Diputación Permanente, como han solicitado el Partido Popular e Izquierda Unida.
Ayer quedó controlado el incendio de Requena (Valencia) y extinguido el de la siena de los Guájares (Granada.). En Murcia, varios retenes proseguían las labores de control del incendio de la zona noroeste de la región.
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