TVE se desvincula de una fundación para la que iba a recaudar 200 millones al descubrir irregularidades

TVE decidió anoche desvincularse de la Fundación Mar del Yaki, con quien había concertado un programa especial para recaudar 200 millones, con fines benéficos, tras haber descubierto que la sede de la citada fundación se emplea también para actividades esotéricas. El especial Tienen derecho, que se emitirá mañana a las diez de la noche y será conducido por Paco Lobatón, donará la recaudación que obtenga de los telespectadores a asociaciones de padres con hijos disminuidos psíquicos y garantizará, mediante una comisión de seguimiento, el uso adecuado de los fondos.

La iniciativa de emitir un programa en TVE que recaudase 200 millones para construir una residencia para minusválidos psíquicos partió de la Fundación Mar del Yaqui, y fue aceptada hace varias semanas por el director de TVE, Ramón Colom, que ya había participado con la misma asociación con otro especial emitido en TVE-1 y conducido por María Teresa Campos, el pasado mes de diciembre. Sin embargo, tras conocer Televisión Española que la sede de la citada fundación también se emplea, en ocasiones, como centro de consultas parapsicológicas, motivó un replanteamiento general del programa y la decisión del director general del Ente. Público RTVE, Jordi García Candau, de donar los fondos a otra entidad benéfica.El especial Tienen derecho le fue encargado hace un mes por Colom a Paco Lobatón, dada su capacidad de convocatoria semanal de Quién sabe dónde, y la respuesta ciudadana ante su especial en ayuda del pueblo bosnio.

Lobatón señaló anoche que desconocía por completo las circunstancias de la Fundación Mar del Yaki y que tanto él como el equipo de su programa llevan un mes trabajando en la elaboración de Tienen derecho, en el que se ofrecerán testimonios sobre los niños deficientes psíquicos que han logrado adaptarse a la sociedad.

"Es un proyecto de gran calidad y que no tiene precedentes en televisión. Creemos", dijo ayer el periodista, "que no debemos privar al público de un testimonio como éste. Es muy positivo que los telespectadores conozcan la valía de estos chicos y de cómo han luchado para conseguir llevar una vida digna". Otra cosa, añadió, son las dudas que puedan surgir sobre la transparencia del proyecto, para lo cual TVE asegura haber adoptado las garantías necesarias.

Lobatón aceptó el proyecto que le presentó Colom con entusiasmo porque le parecía interesenta el proyecto y muy loable la captación de fondos para destinarlos a una obra benéfica. Con este fin, consiguió la participación y el apoyo del cantante Víctor Manuel; las actrices María Asquerino y Aurora Redondo; el deportista José Luis Doreste; el presidente de Unicef en España, Joaquín Ruiz-Giménez; el tifiar de Cruz Roja, Juan Manuel Suárez, y el director del Centro de Educación Especial Princesa Sofía de Madrid, Francisco Millano. También se adhirieron al proyecto las políticas Cristina Almeida y Celia Villalobos, el ciclista Miguel Induráin, el cantante Julio Iglesias y la selección nacional de fútbol en pleno, entre otros.

El objetivo era relatar las circunstancias de una serie de niños disminuidos y recaudar 200 millones de pesetas para construir una residencia con capacidad para 1.560 minisválidos psíquicos. Los telespectadores que desearan aportar dinero a través del programa podrían, además, incluir su nombre en los ladrillos empleados en la construcción del edificio. Lobatón garantizaba a la audiencia, a través de una comisión de control, el uso y conocimiento público del dinero recibido. Todo ello, a través de la Fundación Mar del Yaki.

Sin embargo, EL PAÍS recibió el pasado lunes una serie de informaciones que ponían en entredicho las actividades de dicha fundación, y daban cuenta, entre otras cosas, de que la presidenta, Joaquina Fernández, empleaba los teléfonos y el local de Mar del Yaki para actividades parapsicológicas con particulares y venta al público de amuletos mágicos con presuntos poderes curativos.

Un colaborador de este periódico llamó ayer a la sede de la Fundación Mar del Yaki en demanda de auxilio espiritual y de un talismán para resolver problemas emocionales y personales. La mujer que cogió el teléfono le invitó a pasarse por la fundación y le facilitó la dirección de la misma a fin de tener el próximo viernes una entrevista con su presidenta, Joaquina Fernández, que le haría el amuleto y le resolvería sus problemas. Tras elogiar las cualidades del talismán, le dijo que a ella misma desde que usaba uno, le iba muy bien las cosas. El colaborador de EL PAÍS preguntó cuánto le costaría el artilugio y le respondieron que 6.000 pesetas. Ante sus protestas, fue informado de que esa cantidad era "negociable" si carecía de medios económicos.

Talismanes gratuitos

La presidenta, Joaquina Fernández, negó ayer a este periódico que se usara la sede de la fundación para tales asuntos esotéricos. A continuación, tras ser informada de la llamada del periodista de EL PAÍS, admitió que sí se hacían "de vez en cuando", si bien se apresuró a aclarar: "Las 5.000 pesetas que cobro por la confección de cada talismán van a parar íntegras a la fundación"."Yo puedo demostrar que nunca me he quedado con el dinero de los amuletos. Soy minusválida y vivo con la paga de la Seguridad Social. Todo lo que gano se lo entrego a Mar del Yaki, y tengo documentos que lo prueban", añadió. También dijo que muchas veces confeccionaba los amuletos de forma gratuita y que nunca había ocultado esta actividad. "Incluso una vez llegué a proclamarlo ante las cámaras de Tele 5, y no veo que haya nada de malo en ello", puntualizó. Joaquina Fernández es psicóloga de profesión, pero no ejerce, ni tampoco está colegiada.

TVE dijo ayer haber obrado con desconocimiento total de las actividades de la Fundación Mar del Yaki, y que anoche, tras conocer la venta de los amuletos, decidió desvincularse de la misma. Esta fundación fue inscrita en el Ministerio del Interior el 4 de noviembre de 1992, y en su patronato figuran como vocales, entre otras personas, Celia Villalobos, diputada y europarlamentaria del PP, y Cristina Almeida, abogada y ex diputada de IU.