La edificación más alta de España

¡Qué manía la de querer dar este título a la construcción que no se lo merece! Primero se quiso este récord para la torre Collserola de Norman Foster, de 132 metros de altura, y ahora se le quiere atribuir a la torre de refrigeración de Ascó, de sólo 160 metros de altitud. Y digo sólo 160 metros porque la magnífica chimenea de la central térmica de Puentes de García Rodríguez, cerca de La Coruña, mide 365 metros; o sea, 196 metros de diferencia a favor de la gallega, que tiene, además, un cómodo ascensor que llega a la cúspide, paralelo a dos conductos más de la misma anchura, uno para el humo y el otro que no sé para qué sirve.Esta espléndida chimenea, la primera de Europa, funciona tan bien que, en circunstancias favorables, manda la lluvia ácida que conduce hasta los confines de Irlanda, lo que ha provocado más de un protesta de Dublín.

Con relación al edificio más alto de España, ahora resulta que la torre Mapfre de Barcelona ha crecido y es más alta que la torre Picasso de Madrid, que siempre ha tenido 150 metros de altura, sin antenas, palomares ni macetas del portero; y tengo la certeza moral, aunque yo no las he medido, de que sigue siendo el edificio más alto de España.-