Rebote incierto
La Bolsa está empeñada en la formación de lo que los chartistas llaman figura de vuelta, algo que supone el rebote de las cotizaciones desde un punto que se considera un soporte muy firme. En este caso, el verdadero rebote se ha producido en los mercados monetarios, en los que el dólar ha conseguido cierta estabilidad, y en el mercado de deuda, cuyos precios han hecho caer las rentabilidades con fuerza. La interconexión entre mercados es tan amplia que casi puede afirmarse que lo que vale para uno vale para todos, aunque conviene tener en cuenta que siempre hay uno que marca la pauta y que los demás actúan de comparsas. La Bolsa ha apostado por un. papel secundario en esta fase de ajustes de las economías y de los tipos de interés.La contratación en esta jornada fue de casi 47.000 millones de pesetas efectivas, aunque más de un tercio de esa cifra se consiguió mediante una aplicación sobre el 1,4% del capital social de Repsol. La concentración, sin tener en cuenta esa operación, fue del 30% para los cinco valores más negociados.
La evolución de las bolsas europeas ha sido similar a la de la española con un buen arranque desde la apertura y algunos nervios cuando Wall Street se orientó a la baja. La Bolsa de Nueva York cerró con una nueva pérdida, esta vez de 15,86 puntos, por el temor a una nueva caída del dólar. El índice general de Madrid terminó con un avance del 1,4% que sirve para consolidar el nivel del 300%, mientras que el Ibex 35 recupera la cota del 3.200, con un alza del 1,72%.
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