Butrón frustrado en una céntrica sucursal del banco de Santander

La sucursal del Banco Santander de la calle de Galdo, 1 (Centro), sufrió este fin de semana un butrón. Los ladrones entraron en el sótano de la entidad por un agujero de la pared medianera de un inmueble contiguo abandonado. No consiguieron, sin embargo, forzar la caja fuerte, y se quedaron en la zona de ventanillas. Unicamente forzaron una caja portátil que guardaba un total de 249.900 pesetas destinadas a dar cambio a los clientes de la entidad.Los butroneros, según indicó una fuente de la sucursal, también revolvieron documentos y tiraron ficheros, aunque no se apropiaron de ninguno. "Esto no ha sido un butrón, sino una mera intrusión. Ni siquiera llegaron a la caja fuerte", señaló la citada fuente.

La entidad, situada a unos 500 metros de la Puerta del Sol, carecía de cajas de alquiler, uno de los bocados más apetecidos por los butroneros. El director de la sucursal destacó que las alarmas y sistemas de seguridad habían funcionado.

Los ladrones, de hecho, abandonaron en el lugar una bombona de gas, lo que apunta una huida precipitada. La bombona es empleada habitualmente por los butroneros para alimentar la denominada lanza térmica, un soplete de gran potencia utilizado para fundir cámaras acorazadas.

El último gran butrón fue perpetrado en la sucursal del Central Hispano de la plaza de Santa Bárbara. Fue un golpe de precisión, con un botín de al menos 100 millones.