Las eléctricas invertirán 2.000 millones en cada central que funcione con gas

Las eléctricas deberán invertir unos 2.000 millones antes del año 2000 en cada una de las centrales que se destinarán a producir a partir de gas, según estimaciones del presidente de la patronal Unesa, Luis Magaña. El protocolo de intencio nes sobre el uso del gas en el sector eléctrico español, firmado ayer por las eléctricas y Enagas en presencia del ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, recoge que serán 26 las centrales que funcionarán con gas, lo cual supone unas inversiones de 52.000 millones.

Eguiagaray fijará el precio al que Enagas deberá vender el gas y el secretario general de Industria será el árbitro de las posibles diferencias que puedan surgir entre las compañías eléctricas y Enagas.Las inversiones que deben efectuar las eléctricas para adaptar sus instalaciones al gas, según la explicación de Magaña, se realizarán en dos fases, antes y después del año 2000. En el primer periodo, la adaptación le costará a cada central unos 2.000 millones de pesetas. En principio, las centrales destinadas a producir con gas son 26, según explicaron fuentes eléctricas.

Ello quiere decir que la inversión global rondará los 52.000 millones de pesetas antes de final del siglo. El consumo del gas en centrales térmicas supondrá alrededor del 30% del total en el 2000.

Para un segundo periodo, los cálculos son más difíciles de cuantificar, puesto que se deberán realizar nuevas inversiones y, ya, en todas las centrales. De acuerdo con los cálculos de Magaña, la inversión variará en función del aprovechamiento de las instalaciones, aunquer ondará entre 60.000 y 70.000 pesetas por kilovatio de potencia instalado.

El protocolo suscrito ayer supone en la práctica la colocación del gas que provendrá del gasoducto del Magreb y el espaldarazo defintivo a la fusión entre Enagas y Gas Natural.

Sin embargo, aún queda por definir un aspecto importante para que se concrete la operación, el precio que pagarán las compañías eléctricas por cada termia de gas. Dado que no lograban ponerse de acuerdo con Enagas, la solución incluida en el protocolo es que sea directamente el ministro de Industria el que, anualmente, fije el precio definitivo.

El documento recoge que las eléctricas consumirán gas a partir de 1996 en una cantidad creciente hasta llegar a los 39.120 millones de termias en el año 2000. Una cifra que se mantendrá inalterable hasta el año 2010, fecha en la que finalizará el protocolo.La intervención del Ministerio de Industria no se limitará a fijar el precio de la termia. También actuará de árbitro en caso de que haya un conflicto entre las compañías. En este supuesto, será el secretario general de la Energía el que actúe de mediador. Sus decisiones serán de obligado cumplimiento, según se recoge en el documento firmado ayer.

Tanto el ministro como el presidenie de Unesa y el de Enagas, Pere Durán, resaltaron la importancia de la integración del gas en el conjunto de la producción eléctrica española. Respecto a la fusión de Enagas y Gas Natural, Eguiagaray reiteró que se cerrará próximamente.

Por su parte, Manuel García Fonseca, diputado de IUIC y miembro de la Comisión de Industria y Energía del Congreso de los Diputados, manifestó ayer que "el protocolo es precipitado y opaco, porque no está ultimado el núcleo central del acuerdo, el precio del gas a utilizar por parte de las eléctricas".