La comisión del Senado sobre televisión elogia la calidad, y la rentabilidad de Canal +

La Comisión del Senado sobre Contenidos Televisivos celebró ayer una triple sesión en la que comparecieron para informar sobre sus cadenas Ricardo Visedo, adjunto a la presidencia de Antena 3; Juan Luis Cebrián, consejero delegado de Canal +, y Ramón Villot, presidente de la FORTA. Cebrián dijo, entre otras cosas, que las televisiones españolas, públicas y privadas, no pueden permitirse perder más de 200.000 millones de pesetas anuales.

Visedo anunció que Antena 3 contará en breve con un defensor del telespectador para atender las quejas de la audiencia sobre los, contenidos televisivos. "La creación de un ombudsman, es una prueba de la sensibilización de Antena 3 ante los consumidores de televisión. Sólo un 1% de nuestra programación es discutible. Hay más bazofia en la industria de libros que en la televisión. El mundo audiovisual. se mueve a velocidad de vértigo y no debemos criticarlo con planteamientos; nimios. Los contenidos zafios son menos trascendentes de lo que la gente piensa", afirmó Visedo, quien a su vez criticó a quienes se quejan de la televisión y no la ven.Según Visedo, tiene que haber una colaboración entre las cadenas, la familia y la escuela para crear un clima de buen uso de la televisión por los sectores más indefensos. Y señaló que el sector educativo "ha sido torpe a la hora de aprovechar la televisión en la escuela". Visedo elogió "el sentido familiar" de Antena 3. "No ha sido necesario descender al barro para triunfar", dijo. Reconoció que no existe apenas programación infantil y afirmó no creer que la televisión sea un elemento decisivo en la formación de los niños.

El director adjunto de Antena 3 justificó la contra programación por el hecho de que las televisiones en España "son un mercado emergente, que no está maduro". Calificó el panorama audiovisual español de "irracional, abandonado al salvajismo, sin una regulación apropiada" y acusó a la televisión pública de mantener "un feroz enfrentamiento con las privadas y de contribuir con sus problemas económicos a la ruína de éstas. TVE es un dinosaurio que mientras muere de hambre acaba con los animales que podrían sobrevivir".

Juan Luis Cebrián coincidió con Visedo en la necesidad de un nuevo modelo de funcionamiento para la industria televisiva en España. "Este país no debiera permitirse un sistema que pierde más de 200.000 millones de pesetas al año, entre las televisiones públicas y privadas", afirmó Cebrián, quien apuntó que "el gran futuro de la televisión es la temática".

Cebrián apostó por "una red de televisión de programación temática coherente que permita sobrevivir a las televisiones generalistas. Canal + no quiere competir con las cadenas generalistas. Somos una alternativa para el espectador. Nos interesa que nuestros abonados vean otros canales y que sientan que nosotros les damos un servicio".

"La calidad es nuestro criterio fundamental de programación. Si no damos calidad, no tenemos clientes, y tenemos que justificar ese esfuerzo económico que hacen los abonados", dijo Cebrián. "A Canal + le importa el público, pero no estamos por la lucha por la audiencia a cualquier precio", añadió, y aseguró que no son necesarias grandes inversiones para hacer programación de calidad y que interese a los espectadores, para lo cual citó el ejemplo del programa deportivo de Canal +, que se emite en abierto, El día después.

Los senadores elogiaron la calidad y la rentabilidad de Canal + y algunos de los componentes de la comisión reconocieron que la intervención de Cebrián había paliado su desconocimiento sobre la primera televisión de pago española. Preguntado por la emisión de cine X y las consideraciones morales de la programación de Canal +, Cebrián recordó que esas películas se emiten a altas horas de la madrugada y que los adultos pueden impedir el acceso de los niños simplemente quitando la llave del descodificador.

El último en comparecer fue Ramón Villot, quien señaló que "la crisis del sector y la competencia salvaje también influye en las televisiones autonómicas". El presidente de la FORTA se lamentó de que "a la hora de juzgar los contenidos de programación se aplique a todas las televisiones la misma vara de medir".