Eduardo de Inglaterra

ha visto atendida su petición a la Comisión de Quejas de la Prensa británica, que formuló una protesta en su nombre por la publicación de unas fotos en las que el príncipe besa a su novia, Sophie Rhys-Jones, informaron ayer, jueves, fuentes de la comisión. Las fotografías se tomaron con un teleobjetivo y sin la autorización de la pareja, mientras hacían volar unas cometas en los jardines de la residencia real escocesa de Balmoral, y se publicaron en cinco diarios londinenses el pasado 3 de mayo.Según la comisión, que formuló el miércoles la protesta, la toma de esas fotografías viola el código de conducta de la prensa, que prohíbe el uso de teleobjetivos para tomar fotografías de una persona sin su consentimiento previo y en una propiedad privada. La comisión niega que, como alegan los periódicos, las fotografías se imprimieran en interés del público.

Según los rotativos, las fotografías permitían comprobar por primera vez hasta qué punto es seria la relación entre Eduardo, de 31 años, y Sophie, de 29. Hasta el momento, los diarios Daily Express, Daily Star y Daily Mirror se han disculpado por la publicación de las instantáneas, y Today se ha declarado de acuerdo "hasta cierto punto". The Sun, por el contrario, ha indicado que no ve razón para pedir perdón por unas imágenes que hicieron disfrutar a sus lectores.-