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Entrevista:

"Los socialistas quieren hacer a los demás solidarios a la fuerza"

La Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) acaba de presentar en Madrid su primera memoria de actividades. Creada en Castilla y León, verdadero laboratorio ideológico impulsado por el líder del PP, José María Aznar, amplió su, ámbito en 1992. Su secretario general, Miguel Ángel Cortés, de 35 años, es diputado por Valladolid y secretario general también del Grupo Parlamentario Popular.Pregunta. ¿Los partidos están cada vez menos ideologizados o es la izquierda la que ha perdido sus referencias?

Respuesta. La caída del muro ha supuesto la pérdida de referencias de la izquierda tradicional, pero el fenómeno ha afectado también a las filas contrarias al socialismo. Hoy se reconoce la victoria de los valores de la economía de mercado y, sin embargo, la tentación de la igualdad anida en la naturaleza humana. Hay que permanecer alerta.

P.- Valores como solidaridad o libertad son ya comunes a la derecha y la izquierda, pese a interpretaciones distintas. ¿La diferencia estriba en la igualdad?

R. La diferencia está en si la solidaridad es voluntaria u obligatoria. La solidaridad liberal es voluntaria. Los liberales creemos en la bondad de los hombres, creemos que las personas se ocupan de manera natural de su familia, de sus hijos, de su patria. Los socialistas quieren hacer a los demás mortales solidarios a la fuerza.

P. ¿Qué significa para ustedes la igualdad?

R. Igualdad ante la ley, por supuesto. Y desde un concepto de dignidad humana, la necesidad de garantizar un mínimo por debajo del cual la condición humana no merecería tal nombre. A partir de ahí, el que se esfuerce más, ahorre más o tenga mas suerte debe poder tener un desarrollo superior. La igualdad no puede ser limitadora, porque entonces todos nos empobrecemos.

P. La fundación trabaja con entidades parecidas de toda Europa. ¿Qué ideas predominan hoy en el centro-derecha, conservadurismo, liberalismo, democracia cristiana?

R Ese encasillamiento en el campo no socialista está difuminado. El PP es una buena muestra de convergencia de los tres sectores, que hoy comparten valores básicos, los valores tradicionales que han hecho las sociedades civilizadas.

P. La izquierda vuelve a ganar elecciones en Grecia y los Países Bajos, y la derecha retrocede en el Reino Unido o Alemania. ¿Llega el reflujo?

R. Lo que se produce es el turno y el cambio, esencial en la democracia. La cuestión es ver lo que se hace. Se privatizan empresas en vez de nacionalizarlas, y los individuos quieren más capacidad de decisión en vez de pagar más impuestos y que decidan por ellos los burócratas. No sólo el fracaso del socialismo real, también el fracaso de la socialdemocracia es de tal evidencia que lo que están haciendo es cambiar. Aquí muchos han llegado a la conclusión de que socialismo es lo que hacen los socialistas, sin más referencia teórica.

P. ¿Qué representa para usted la entrada en el Gobierno italiano de los herederos más o menos directos del fascismo?

R. No creo que se pueda hacer ningún símil con situaciones de los años treinta. Esas organizaciones entran en el sistema, no ponen en cuestión, como hicieron entonces, las instituciones democráticas liberales. En todo caso, es mejor que haya fuerzas centradas, como el Partido Popular. En España tenemos la fortuna de que la pujanza del PP evita ese tipo de fenómenos.

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