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Los integristas armados degüellan en Argelia un abogado que defendía a fundamentalistas

El cuerpo del abogado Grine Laid, de 49 años de edad, especializado en la defensa de militantes fundamentalistas implicados en supuestos delitos de terrorismo, apareció degollado el pasado sábado en los alrededores de la localidad de Regaia, a unos 35 kilómetros al sur de Argel. Horas antes había sido secuestrado en su domicilio por unos desconocidos. El asesinato de este abogado, el segundo que se produce en los últimos meses en Argelia, coincide con una supuesta oleada de amenazas efectuadas por el movimiento integrista radical Grupo Islámico Armado (GIA), que trata de convencer a abogados para que abandonen la defensa de los militantes integristas que son juzgados por terrorismo.

En medios políticos se asegura que con esta operación dirigida contra los abogados, el Grupo Islámico Armado trata de poner en evidencia la ilegitimidad y la falta de garantías jurídicas de los procedimientos penales seguidos contra sus militantes en los tribunales especiales, que fueron creados hace más de dos años al entrar en vigor el estado de excepción.Sin embargo, estas amenazas han sido calificadas al menos como de "ambiguas" y "poco claras" por determinados letrados, que señalan que con esta táctica lo que en realidad se pretende es dejar indefensos a los acusados juzgados por los tribunales especiales, y enfrentados en la mayoría de los casos a graves sanciones, incluida la pena de muerte.

Según las citadas fuentes, los responsables de este asesinato podrían ser los militantes del movimiento antiterrorista OJAL (Organización de Jóvenes Argelinos Libres) una organización secreta creada hace cerca de un año y que tiene ciertas concomitancias con la antigua OAS (Organización del Ejército Secreto), formada durante la guerra de liberación por los franceses opuestos a la descolonización y responsable de numerosos atentados en Argelia y Francia.

El secuestro y asesinato del abogado Grine se produjeron pocos días después de que lograra la libertad de un grupo de fundamentalistas que fueron juzgados por delitos de terrorismo ante uno de estos tribunales especiales, según se asegura en medios allegados a la abogacía. Pero además Grine Laid era fundador y dirigente del partido RA1 (Agrupación Arabo-Islámico), una pequeña organización de carácter islamista moderada, creada el 3 de septiembre de 1990 y que en agosto de 1991, poco antes de las elecciones legislativas, celebró su primer congreso constituyente. Este partido tiene como objetivo primordial la arabización de la sociedad argelina, la modificación de los planes pedagógicos y su adecuación a los preceptos islámicos o charla.

El partido RAI, implantado básicamente en el Gran Argel, se encuentra sometido desde hace varios meses a una profunda crisis, surgida como consecuencia de un enfrentamiento entre el máximo dirigente de la organización, Mohamed Zeghud, y el propio Grine Laid que ha llegado a los tribunales.

La noticia del asesinato de Grine Laid se conoció el sábado por la mañana en los corrillos del Palacio de Justicia de Argel, provocando la conmoción y la indignación de los letrados, que se reunieron inmediatamente en un intento de conocer las circunstancias y adoptar medidas de protesta. En un comunicado difundido anoche, los abogados de Argel anunciaron que pararán el trabajó hoy en señal de protesta.

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Falta de garantías

Pocas horas antes de conocerse el asesinato de este abogado la Liga Argelina Democrática de Derechos Humanos, que preside Ali Yahia, hacía público un comunicado en el que denuncia la situación de violencia en la que se encuentra sumido el país, así como la falta de garantías jurídicas y procesales.Los dirigentes de la organización preguntan sobre la suerte de numerosos argelinos "detenidos desde hace semanas sin que se les presente ante los tribunales de justicia y sin que se ofrezca información de sus detenciones a los familiares y amigos".

La Liga pide en tono enérgico que se ponga fin a "esta horrible caza del hombre" y responsabiliza a los servicios de seguridad de efectuar "represalias desproporcionadas sobre la. población, haciendo ellos mismos la justicia y ejecutando de manera sumaria a ciudadanos argelinos arrestados en sus domicilios".

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