"Lo mejor que puede hacer España es invertir en formación"

La semana pasada este periódico informaba de que Derbi sopesa ba trasladar su producción a Asia. El ministro de Trabajo, José Antonio Griñán, justificaba después al fabricante español de motos por los menores sueldos del país asiático y por "la mundialización de la economía". En una conversación con EL PAIS, Lester Thurow desarrollaba un día más tarde lo que el ministro quizá tan sólo se atrevió a esbozar, y pintaba bien oscuro el futuro de la mayoría de trabajado res españoles: salarios cada vez más bajos y menos Estado de bienestar. Buen conocedor de Europa, Thurow ha visitado España en numerosas ocasiones -esta se mana pasada invitado por la Fundación Cultural Banesto.-

Pregunta. En 1987 usted auguró que el crecimiento de España entonces (5% anual) no podía durar mucho. Y acertó. ¿Se atreve a predecir ahora qué pasará en los próximos dos o tres años?

Respuesta. En los ochenta tu vimos una burbuja especulativa. A las burbujas especulativas siempre les sigue un crash finan ciero. Tuvimos uno bien importante al comienzo de los noventa. Y después, un largo periodo de crecimiento lento o negativo para limpiar todo el desastre. Y en eso estamos. Así que vamos a atravesar un periodo de crecimiento lento, tanto en España como en otras partes.

P. Como en otras partes, pero peor, ¿no? Nadie tiene el desempleo que hay en España.

R. En cualquier país le dirán que su economía es la peor del mundo. Pero la que se encuentra en peor estado es la japonesa. Aunque oficialmente el paro es sólo del 3%, hay un porcentaje muy elevado de trabajadores empleados que no tienen nada que hacer, así que el desempleo no oficial puede llegar al 15% o al 20%. La diferencia con España es que mientras aquí hay un se guro de desempleo público, en Japón es privado: la empresa te sigue pagando un sueldo, aun que no tiene un trabajo para ti.

Las turbulencias del sistema financiero internacional han ocasionado que la economía mundial haya crecido a un ritmo medio del 1,5% en los últimos años: está claro que el desempleo tiene que aumentar. La pregunta es dónde. En Europa es dónde más ha aumentado, y el porqué está claro.

P. ¿Por qué?

R. Por haber protegido los sa larios de los que tienen trabajo. En EE UU hemos dejado que los salarios desciendan, y así hemos creado mucho empleo.

P. Pero no han caído todos los salarios. Sólo los más bajos y especialmente el 10% que menos cobra. R. Bueno, sí. Pero fíjese en China. ¿Cuánta gente dispone en China de una buena educación, superior a la media de un español que no haya ido a la universidad? Millones, porque los comunistas no manejan bien la economía pero tienen buenos sistemas educativos. ¿Por qué tendría yo que pagar 15.000 dólares al año [unos 2,3 millones de pesetas] a un español si puedo tener lo mismo pagando 30 dólares al mes [4.500 pesetas]?

Si Occidente deja que los salarios de los trabajadores con menor sueldo bajen aún más, podrá mantener el empleo. Si no lo hace, como aquí en España, no creará empleo. P. Pues entonces no es extraño que se piense que la liberalización del comercio mundial es un truco para bajar los sueldos en Europa.

R. Sólo a la mitad inferior. El otro problema es que Europa no puede ponerse en marcha sin la locomotora alemana. Es imposibleque España crezca si Alemania crece al 0%. Se puede hacer algo mejor o algo peor; eso es todo.

P. ¿Quiere eso decir que el Gobierno no tiene muchas alternativas?

R. No creo que haya mucha diferencia ahora entre Gobiernos de derechas o de izquierdas.P. Pero usted siempre ha defendido que el capitalismo necesita Gobiernos fuertes... .

R. ...Gobiernos efectivos...

P. ¿Cree que España tiene ahora mismo un Gobierno efectivo?

R. Todos los países industrializados se enfrentan al problema de recortar el Estado de bienestar. El punto central es diferente en cada país. En España es claramente el subsidio de paro. ¿El Gobierno es eficiente? La contestación es: ¿Está luchando contra los importantes problemas estructurales? Este Gobierno no ha querido enfrentarse a ellos.P. ¿A qué otros problemas estructurales se refiere? Usted ha escrito en su último libro que si un país deja que le arrebaten su mercado interno, lo acabará pagando con desempleo. ¿Es lo que ha pasado aquí?

R. Hay tres puntos relevantes respecto a esto. España no puede permitirse los sueldos de Alemania, porque no tiene la formación [profesional y universitaria] suficiente. Lo mejor que puede hacer un país como España es invertir en formación: en la actualidad está bastante por detrás de Francia o Alemania.

Y luego otra cosa. Cualquier país medio, como España, tiene que tener unas cuantas grandes empresas para jugar al juego mundial. Holanda tiene la Shell, la Philips; en Suecia hay Volvo, ABB; Suiza, Nestlé, Hoffmann- La Roche. Incluso Corea cuenta con Tandy o Goldstar. Hay que tener unas pocas empresas mundiales: son las que invierten en investigación, las que conocen el resto del mundo...

P. Explíqueme cómo se consiguen empresas de ésas ahora.

R. Yo creo que se pueden crear. Pero hay que tener visión. El mayor problema de España es que la visión que se tuvo durante los ochenta funciona un rato, mientras acuden los capitales extranjeros, pero luego, cuando los salarios suben y hay que transformarse en un país con tecnología, se acabó.

P. O sea, que el Gobierno no ha tenido una política industrial efectiva, para utilizar su expresión.R. Es usted quien dice eso.

P. Ya. ¿Y usted qué opina?

R. No soy un gran experto en España, pero no se ve que [el Gobierno] tenga una estrategia en este campo.

P. Pero tener grandes empresas ya no es garantía de mucho. Usted mismo ha explicado que las empresas alemanas no podrán seguir siendo tan generosas con sus permisos de maternidad, por ejemplo, si el resto del mundo no está dispuesto a hacer lo mismo. ¿Cree que habría que imponer al Tercer Mundo un mínimo de reglamentación social?

R. Se puede intentar imponer el Estado de bienestar a Taiwan, pero hay un límite. Incluso en Occidente tendrá que disminuir. Igual que los sueldos. El fenómeno de disminución de salarios empezó en EE UU, siguió en otros países como el Reino Unido y ahora empieza a verse en Europa continental.

P. Es decir, ¿lo único que pueden esperar la mitad de los trabajadores en España es un futuro con menores salarios y menos Estado de bienestar? Ningún Gobierno se ha atrevido a decir eso hasta ahora.

R. Pues mire, es lo que ha sucedido en EE UU en los últimos 20 años. En ese tiempo, el sueldo del 60% inferior de los trabajadores descendió un 1% cada año. En total, un descenso del 20% en dos décadas.