Mensaje del Papa desde el hospital

Juan Pablo II recordó ayer con voz entrecortada la fiesta del Primero de Mayo durante el rezo del Regina Coeli, la oración que sustituye al Angelus en este período de Pascua, retransmitido por Radio Vaticano a la megafonía de la plaza de San Pedro y del exterior del hospital romano donde el Papa convalece de la operación de cadera a que fue sometido el pasado viernes tras sufrir una caída."Hubiera tenido que estar hoy en Sicilia, concretamente en Siracusa. En cambio, me encuentro otra vez en este santuario que es el hospital, donde se vierten todos los días lágrimas de dolor y de esperanza", dijo el Papa. "Los designios de la Divina Providencia son siempre misteriosos. Hoy, Primero de Mayo, tengo particularmente presente en mis plegarias al mundo del trabajo. Recuerdo, sobre todo, a los que se encuentran en situaciones difíciles o desempleados, sobre todo si son jóvenes".

El Papa hizo votos por que "se supere cuanto antes" la actual coyuntura económica difícil. Finalmente, recordó el año de la familia, que la Iglesia celebra en 1994, y agradeció a todos los que se han acordado de él en estos días, y a los que rezan por él. También se unió a la celebración de la Pascua ortodoxa, que las iglesias orientales celebraban ayer, con arreglo al calendario juliano. "Deseo a todos", concluyó, "un buen domingo y un buen mes de mayo, una primavera auténtica".