La fiscalía de Darmstadt mantiene abierto el "caso Superlópez", tras encontrar indicios de espionaje

La fiscalía de la Audiencia Provincial de Darmstadt, en Alemania, comunicó ayer que la investigación contra el directivo español de Volkswagen (VW) José Ignacio López Arriortúa -Superlópez-, continúa abierta y no se puede anticipar si concluirá con un procesamiento. No obstante, la fiscalía expone con detalle cuatro elementos que pueden contener indicios de culpabilidad. Entre los datos que cita, figura el proyecto de construir una fábrica en Amorebieta (Vizcaya).En el primer punto, la fiscalía expone que en la casa de Wiesbaden, donde vivían dos de los acusados con López, se encontraron cajas de cartón con documentación. Testigos de la empresa Opel, donde trabajaba el ejecutivo español antes de irse a VW, identificaron documentos hallados allí como secretos. Se trata de los planes de desarrollo del llamado 0-Car (Coche-0) y además planes de desarrollo y estrategias de compra y ahorro de la empresa Adam Opel S.A. Añade la fiscalía que continúan las investigaciones, para averiguar "si esos documentos fueron a parar al ámbito de la empresa Volkswagen".

Discos de ordenador

El segundo punto se refiere a los registros en las oficinas de los acusados en VW. Allí se encontraron discos de ordenador con informaciones, "en las que existe la sospecha de que para su elaboración se utilizaron como base documentos procedentes de la firma Opel".El punto tercero se refiere a la fábrica de Amorebieta, una especie de niña de los ojos de López. Constata la fiscalía que durante su actividad en Opel a partir de 1992, López se ocupó del proyecto de construir una fábrica en el País Vasco, que tenía el nombre interno de Planta X. Un estudio del desarrollo de esa planta había sido calificado por Opel como secreto. Según el comunicado de los fiscales, "también después de su paso a la empresa Volkswagen S.A. se ocupó el acusado López de la planificación de una planta en el País Vasco, ahora bajo la denominación Planta B. Una comparación de los datos recogidos en la oficina del acusado López en Volkswagen sobre la Planta B con los documentos de Opel o General Motors sobre la Planta X ha dado como resultado que existen indicios de coincidencias".

Finalmente, la fiscalía constata que en los registros realizados "en la esfera privada en el entorno del acusado López" se encontró un disco de ordenador con datos sobre los programas de ahorro de la empresa General Motors.

La declaración de la Fiscalía fue acogida con satisfacción en la Opel y con cierta reserva por parte de Volkswagen. Opel afirma que la declaración "confirma la convicción de la Adam Opel S.A. de que fueron sustraídos, de forma evidente y sistemática, gran cantidad de documentos secretos de planificación y estructuras de costes altamente sensibles para favorecer a un competidor".

Por su parte un portavoz de VW, Andreas Meurer, se limitó a declarar ante el documento de la fiscalía que las acusaciones "no son nuevas y nada nos ha sorprendido".