_
_
_
_

El rosario de la Auroa

Vicente González Olaya

Las curiosidades de las procesiones madrileñas se remontan a siglos atrás. Según afirman algunos expertos, Felipe IV estaba disgustado por la nula organización que regía en las calles de Madrid. Cada paso recorría las calles elegidas por sus cofrades y se modificaba sobre la marcha, según las apetencias de los penitentes. Para solucionarlo, el rey decidió imponer la obligatoriedad de pasar delante del Palacio de Oriente. Ni así cesaron los escándalos y los enfrentamientos entre las cofradías. Al final, los gremios se aburrieron y abandonaron la tradición. La Semana Santa comenzó a decaer. Sin embargo, durante la guerra de la Independencia las procesiones sirvieron para otros fines. Los guerrilleros pensaron que primero era la obligación que la devoción. Por eso utilizaron los pasos como escondrijo para transportar armas entre las líneas napoleónicas.Pero la Semana Santa también ha servido, en alguna ocasión, para dirimir otras diferencias entre las cofradías. La tradición asegura que en una fecha indeterminada dos procesiones se encontraron en una estrecha calle de la ciudad. La más numerosa, la de la Virgen de la Aurora, intentó hacer valer su derecho de paso. LoS cofrades de la otra procesión no se lo permitieron. Comenzó entonces una fortísima pelea que acabó a farolazos, o, como se conoce en el argot popular, como el rosario de la Aurora.

Más información
Judas y las mujeres
14 procesiones recorren las calles madrileñas

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Vicente González Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_